EE UU ofrece a los palestinos de la diáspora una participación parcial en la conferencia de paz
Las negociaciones multilaterales en el marco de la Conferencia de Paz para Oriente Próximo se inauguraron ayer en la capital rusa con la ausencia de los palestinos, protagonistas clave de¡ conflicto árabe-israelí, debido a que su delegación incluía a miembros de Jerusalén Este y de la diáspora, cosa que no acepta Israel. Sin embargo, Estados Unidos abrió el portillo para que los palestinos de la diáspora puedan participar en futuros grupos de trabajo sobre materias que les afectan, algo que la delegación palestina parecía ayer dispuesta a aceptar. Israel, mientras, logró una notable victoria diplomática al compartir mesa negociadora con delegaciones árabes a pesar de la ausencia palestina.
La delegación palestina que está en Moscú incluye entre sus nueve miembros a personas que no proceden de Cisjordania ni de Gaza, lo que contraviene la fórmula de Madrid, según la cual sólo se aceptaban palestinos de los territorios ocupados, exceptuando Jerusalén Este. Ésta fue una condición impuesta por los israelíes que los palestinos cumplieron, según explicó la portavoz de la delegación palestina, Hanan Ashraui, para que las negociaciones de paz pudieran comenzar.
Pero para los palestinos lo que es viable en cuanto a las conversaciones bilaterales no lo es para las multilaterales. "El que Israel haya impuesto restricciones antinaturales que hasta la fecha han sido aceptadas por esta conferencia a pesar del reconocimiento universal de la unidad del pueblo palestino socava las bases de estas conversaciones e invalida su contenido", decía una declaración de la delegación.
Las negociaciones que se llevaron a cabo durante la noche del lunes para tratar de encontrar una fórmula de compromiso no dieron resultados. El secretario de Estado norteamericano, James Baker, propuso ayer que los tres palestinos que, sí acepta Israel, ocuparan sus asientos en la mesa de conversaciones y que luego, en los grupos de trabajo pertinentes, se incluyera a los palestinos que no se ajustan a la fórmula de Madrid. Esta propuesta estaba siendo estudiada "seriamente" por la delegación palestina, aseguré Ashraui, quien dijo que se le iba a dar una respuesta "constructiva", por lo que no se excluye que hoy se decidan a participar en la conferencia.
Estas negociaciones multilaterales, copatrocinadas por EE UU y Rusia, han sido boicoteadas por Líbano y Siria, pero a ellas han acudido 10 países árabes: Arabia Saudí, Bahrein, Egipto, Kuwait, Marruecos, Mauritania, Omán, Qatar, Túnez y la Unión de Emiratos Árabes. Además, participan en la Conferencia de Moscú la Asociación Europea de Libre Comercio, Canadá, la Comunidad Europea, China, Japón y Turquía, así como también varios miembros de la Comunidad de Estados Independientes.
El secretario de Estado norteamericano pasó revista a los problemas que hoy discutirán los grupos de trabajo -desarrollo económico, medio ambiente, agua, control de armas y seguridad regional, y refugiados, tema éste que no estaba en la agenda de Moscú y propuso una serie de "modestas medidas" para crear confianza, encaminadas a reducir las posibilidades del estallido de guerras fortuitas en la región.
Andréi Kóirev, ministro de Exteriores de Rusia, aseguró que su país "no competirá con nadie" para ganar influencia ideológica o esferas de dominio militar. "Las ambiciones imperialistas nos son ajenas", sentenció. Esto, sin embargo, no significa que Rusia vaya a renunciar a su papel de gran potencia ni a su calidad de miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU.
Reducción de armamentos
Kózirev se refirió a la necesidad de reducir los armamentos en la zona y dijo que una de las metas primordiales de las negociaciones multilaterales es conseguir un equilibrio de fuerzas a la baja. "El hecho de que los países árabes e Israel compartieran el peligro común de una dictadura tiránica [la de Sadam Husein] que amenazaba a toda la península Arábiga, y el que este régimen fuera árabe, hizo comprender claramente al mundo y a la mayoría de los países árabes la necesidad y posibilidad de terminar el largo, cruel y estéril conflicto que enfrenta a árabes e israelíes", dijo, a su vez, el ministro de Exteriores de Israel, David Levy. Israel "propone a sus vecinos una amplia cooperación que puede conducir a la revitalización y la prosperidad en muchas esferas", indicó Levy, ofreciendo su experiencia tecnológica en irrigación, desalinización, transporte de agua y energía solar.
El representante jordano, Karnel Abu Jaber, subrayó que la conferencia no encontraría soluciones realistas sin la participación de la diáspora palestina.
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