Se publica un disco póstumo del guitarrista Stevie Ray Vaughan

En el Estado norteamericano de Tejas dicen que cuando un guitarrista no quiere parecerse a Stevie Ray Vaughan es que ha perdido el juicio. Con su muerte, en un accidente de helicóptero el 27 de agosto de 1990, el blues blanco perdió a su hombre más creativo e innovador. Un año después, el también guitarrista Jimmie Vaughan, miembro del grupo The Fabulous Thunderbirds, comenzó a trabajar con las cintas que su hermano había grabado a lo largo de su carrera. The sky is crying es el disco, recién publicado en España, que recopila ese material: 10 canciones jamás editadas.

"Stevie siempre quiso rendir tributo a sus héroes, a aquellos guitarristas que de alguna manera le habían enseñado todo lo que sabía. No le dio tiempo", dice Jimmie Vaughan en los créditos del disco. "En este disco, Stevie da las gracias a Muddy Waters, Albert King, Jimmi Hendrix y Lonnie Mack". Con su muerte, Stevie Ray Vaughan pasó a formar parte de la historia de la mejor música del Estado de la estrella solitaria; desde entonces, el nombre de este ganador de dos premios Grammy se pronuncia junto a los de los también tejanos Buddy Holly, Janis Joplin, Huddie Leadbelly Leadbetter, Sam Lightnin Hopkins, Charlie Christian, Roy Orbison y Aaron T-Bone Walker.The sky is crying (SonyEpic) está formado por dos canciones escritas por el propio Stevie Ray Vaughan (Empty arms y So excited) y ocho versiones de temas más o menos clásicos. Desde el Little wing de Jimi Hendrix a Close to you (Willie Dixon), May I have a talk with you (Howlin'Wolf), Wham (Lonnie Mack), Chitlins con carne (Kennie Burrell) y el tradicional Boot hill. Las grabaciones proceden de tres sesiones, realizadas en los años 1984, 1985 y 1989, y han sido tratadas, de forma muy superficial según Jimmie Vaughan, por el ingeniero de sonido Richard Mullen.

"Yo nunca, en toda mi vida, había llorado", ha confesado el veterano bluesman John Lee Hooker, una leyenda viva de 70 años considerado uno de los músicos más influyentes de la historia del blues, "pero cuando escuché en la radio que Stevie había muerto no pude controlarme. Me tumbé en la cama y lloré como un niño pequeño. Su nuevo disco será cómo tenerle un poco más entre nosotros, recuperarle por unos minutos".

Tenía fama de ser muy duro con sus guitarras y muy blando con sus amigos. Jamás rompía cuerdas, pero apretaba con tal fuerza el resto del instrumento que tenían que ser revisadas continuamente. Sus compañeros de los malos tiempos le acompañaban realizando cualquier tipo de trabajo de apoyo al grupo; él, con su sombrero Stetson, sus botas de piel de serpiente y su tatuaje de un pavo real, solía decir que sólo era "un chico blanco tratando de imitar a Albert King".

Ann Richard, gobernador del Estado de Tejas, ha proclamado de forma oficial el 3 de octubre como El día de Stevie Ray Vaughan. El guitarrista nació el 3 de octubre de 1954 en Dallas, Tejas. Comenzó, a tocar la guitarra influido por Jimmie, su hermano mayor, y en 1972 abandonó los estudios y se trasladó definitivamente a Austin para dedicarse por entero a la música. Mediados los setenta formó parte del grupo The Co bras, y poco después formó su propia banda: Triple Threat (Triple Amenaza). Cuando realizó el último cambio de nombre, bautizando a su grupo definitivo como Double Trouble (Doble Problema), ya era un virtuoso instrumentista, al que la prensa comparaba con Hendrix. Vaughan se sonrojaba y decía: "La verdad es que soñaba con él a menudo. Jimi me enseñaba cambios de acordes especiales, pero cuando me despertaba no lograba acordarme de la lección. Con el tiempo comprendí que aquello era justo. En esto de la guitarra no hay milagros, ni tan siquiera trucos. Tienes que aprender por ti mismo, tocando una y otra vez hasta que los dedos sangren".

Ray Vaughan y Double Trouble causaron conmoción con su actuación en la edición de 1982 del Festival de Montreux. David Bowie solicitó sus servicios para grabar el elepé Lets dance, y el popular cazatalentos John Hammond les propuso grabar un primer disco. Texas flood, el primero de los siete discos grabados por Vaughan y su grupo, se puso a la venta en el verano del 83.