Las profundas diferencias entre EE UU y la CE impiden desbloquear la negociación del GATT

Estados Unidos y la CE confirmaron ayer en Bruselas el profundo enfrentamiento de intereses que impide desbloquear la Ronda de Uruguay del GATT. El capítulo agrícola sigue siendo el principal punto de discrepancia, porque la Comunidad "no aceptará que se ponga en peligro el objetivo fundamental de la reforma de la política agrícola común", manifestó el comisario Frans Andriessen. Las diferencias, en este caso por la oposición norteamericana, se extienden a temas clave para Europa como la liberalización de los servicios o el mecanismo multilateral para zanjar conflictos.

El secretario de Estado norteamericano James Baker, fue prudente al afirmar que "hemos progresado, aunque no hemos logrado acercar totalmente nuestros puntos de vista". El presidente de la CE, el primer ministro holandés Ruud Lubbers, no dejó lugar a dudas. "Las divergencias profundas se mantienen y el resultado es decepcionante", dijo.Las dos partes, en un encuentro al más alto nivel celebrado el pasado 9 de noviembre en La Haya, se habían comprometido a "un último esfuerzo para lograr un acuerdo", en, el que está en juego el reparto de los 380 millones de pesetas a que ascienden al año los intercambios mundiales de bienes y servicios.

Entre la Comunidad Europea, primera potencia comercial, Estados Unidos y Japón completan más de la mitad del comercio mundial. La Ronda de Uruguay, la más ambiciosa de las ocho celebradas en los 43 años de historia del GATT (Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio), fue inaugurada el 26 de septiembre de 1986 en Punta del Este (Uruguay), pero lleva acumulado más de un año de retraso. La conferencia celebrada en diciembre de 1990 en Bruselas terminó con un absoluto y rotundo fracaso.

Las posiciones están singularmente encontradas en el capítulo agrícola. Los Doce aceptan reducir sus subvenciones agrarias un 35%, pero EE UU considera insuficiente este recorte. El enfrentamiento principal radica, sin embargo, en las exportaciones agrícolas. La CE propone recortar un tercio las subvenciones para exportar excedentes y disminuir en dos terceras partes las exportaciones.

Más mercado libre

Los norteamericanos piden más mercado libre para sacar de la profunda recesión a los seis Estados cerealeros del Norte (Dakota del Norte, Dakota del Sur, Nebraska, Kansas, lowa, Minnesota). Y como la economía estadounidense está en coyuntura de crisis se niegan a abrir sus servicios a la competencia europea: "El equilibrio global" que demanda la CE.

Baker explicó que la batalla es por "reducir lo más posible las subvenciones agrícolas, pero el objetivo de la eliminación total, planteado hace unos años por EE UU, es hoy demasiado ambicioso, idealista".

Los ministros de Agricultura y Comercio de la Comunidad celebrarán mañana en Bruselas una reunión extraordinaria para analizar la última propuesta de compromiso (451 páginas) presentada el viernes por Arthur Dunkel, director general del GATT. Francia ya había anticipado que no está de acuerdo y ayer el comisario de Agricultura, Ray Mac Sharry, expresó la posición comunitaria de que las ayudas por héctarea y las primas al vacuno no sean admitidas como verdes (permitidas sin contabilizar como subvención).

La propuesta de Dunkel no ha sido bien recibida por nadie. Carla Hills, representante norteamericana para el Comercio, manifestó que los capítulos referentes a servicios "serán estudiados durante el próximo trimestre y que las negociaciones continuarán en Ginebra,". Es decir, el posible acuerdo va para largo.

El secretario de Agricultura, Ed Madigan, fue aún más escéptico. Andriessen, responsable de la política exterior de la CE, reconoció que "existen dificultades en diferentes sectores, incluida la agricultura".

El único punto de encuentro entre todos es el consenso para dar salida a los excedentes agrarios en la ayuda alimentaria a las repúblicas de la extinta URSS.