Árabes e israelíes irán a Washington para negociar la paz en Oriente Próximo
La intensa actividad diplomática que promovió la invitación norteamericana para reanudar las conversaciones de paz entre árabes e israelíes en Washington dentro de ocho días tenía ayer rasgos absolutamente claros. A regañadientes, el Gobierno israelí enviará su delegación a la capital norteamericana con una postura mucho menos flexible que la demostrada en Madrid hace un mes. Siria, que prefiere mantener el diálogo en Madrid, también irá a Washington. Los palestinos ya dijeron que sí, indirectamente. El proceso de Madrid continuará en Washington si George Bush da las mismas garantías para que el diálogo se desenvuelva en una atmósfera de hospitalidad y habilidad diplomática similar a la que los enemigos de Oriente Próximo hallaron en el Palacio de Oriente.Entre las consultas que se realizaban anoche en varias capitales de Oriente Próximo, quizá la más importante era la que emprendió el presidente egipcio, Hosni Mubarak. El rais invirtió varias horas para tratar de persuadir al presidente sirio, Hafez el Asad, de que entrar en la segunda fase del proceso de paz significa poner en marcha el más amplio y controvertido diálogo multilateral: las discusiones sobre el agua, el desarme y la creación de una atmósfera capaz de generar, por primera vez, un mecanismo de cooperación entre árabes e israelíes. O sea, adiós a las armas.
No todos los palestinos comparten la euforia de Madrid. En las calles de Jerusalén, Beirut, Ammán o El Cairo, el escepticismo es una constante, aunque tratan de luchar contra este estado de ánimo. Jaled al Hasan, padre fundador de Al Fatah, afirmó: "Tenemos que pensar que debe haber una solución. Tenemos que creer que algo, algo saldrá".
Las palabras de Hasan expresan, de alguna forma, las esperanzas palestinas. Pero son actitudes como la de Isaac Shamir las que ilustran nítidamente la inamovilidad israelí. El jefe del Gobierno derechista del Estado judío aprovechó su visita a EE UU para reiterar que Israel jamás cederá un centímetro de territorio capturado a los árabes.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.