A propósito de Asturias,

Como asturianos, nos preocupa la idea que haya podido crearse en el resto de España en torno a la huelga general del pasado día 23 de octubre en Asturias.La crisis de Asturias no debe reducirse exclusivamente a la crisis de Hunosa, puesto que, en contra de lo que algunos quieren hacernos creer, se trata de una crisis global: minería, siderurgia, naval, campo, pesca, transportes, fertilizantes, fabricación de armas...

La del 23-O ha sido una manifestación de madurez de todo un pueblo, que salió a la calle no por los piquetes, sino porque la gravedad de la situación lo requería. Y ello, en ausencia casi total de incidentes, pese a insultos como los de Felipe González al hablar de "batallitas", o los de José María Cuevas al hablar de "espectáculo" al referirse a esta convocatoria.

En Asturias no existe una tensión social que intimide a los inversores. Todos saben que la huelga no iba contra los empresarios; desde la empresa Thyssen, instalada en Mieres, se ha dicho que el clima laboral en Asturias es tan bueno como en cualquier -otra región española. Quien así arremete contra los empresarios es el señor González al hablar de "disfraces". La respuesta de Marcelino Somohano, presidente de los empresarios asturianos, apuntando que el verdadeo disfraz ha sido el ocultar la situación real de la empresa pública en Asturias es acertada. En este sentido parece manifestarse Solchaga cuando dice que el sector público ha mantenido todo el empleo posible en Hunosa, aun siendo -consciente de que su rentabilidad es irnposible. Eso sí son disfraces, señor González; ustedessabían hace tiempo que la rentabilidad de Hunosa es imposible y, sin embargo, no han afrontado esa situación hasta que la CE se lo ha impuesto definitivamente y han estado tirando un dinero que se podía haber invertido en un tránsito progresivo a una nueva situación industrial.

Aunque Aranzadi diga que con Dupont ya ha comenzado la reindustrialización, sabe que la implantación de ésta es previa al mazazo preparado por el INI y que ha sido posible por los grandes incentivos dados a la empresa desde Asturias. Siendo una inversión importante, no se puede presentar como alternativa a los empleos que se perderán en las cuencas, dada la alta cualificación profesional requerida por Dupont.

Asimismo, no se invierte en vías de comunicación consideradas prioritarias en Bruselas, como la autovía del Cantábrico y la variante ferroviaria de Pajares, demandada ésta por todos los partidos, empresarios y sindicatos asturianos, salvo el PSOE, que prefiere incrementar el déficií público con el tren de alta velocidad sevillano. ¿Cómo pretende Felipe que el sector privado reindustrialice Asturias sin las citadas vías?

González ha hecho mucha demagogia. Mismamente, y es sólo un ejemplo, cuando dice que nadie está más preocupado que él por el futuro de Asturias; somos asturianos y, con 24 años, nos consideramos protagonistas de ese futuro que desde el Gobierno se empeñan en pintar de negro- Manuel Méndez Baliela y nueve firmas más.