La diplomacia de EE UU logra que los sirios acudan a su cita con Israel

A la segunda fue la vencida. La delegación siria acudió por fin ayer a su cita con los israelíes, 12 horas más tarde de lo previsto y en un lugar diferente del establecido. Su oposición a que se celebraran en sedes distintas las negociaciones bilaterales entre las delegaciones árabes y sus interlocutores israelíes estuvo a punto de bloquear la segunda fase del proceso de paz. Sin embargo, los buenos oficios de la diplomacia norteamericana lograron vencer ese obstáculo.

A cambio, los sirios -que a las 10,35 de la noche entraban en el palacio de Parcent- renunciaron a su exigencia de que las conversaciones fueran simultáneas.Disgustada por los aspectos de forma que amenazaban con diluir la Conferencia de Madrid en una mera ronda de reuniones bilaterales, la delegación siria no se presentó a la cita de las 10 de la mañana en el palacio de Viana. El riesgo de que se rompiera el hilo del proceso de paz accionó de inmediato gestiones para destensarlo. Desde El Cairo y Riad, el presidente egipcio, Mohamed Hosni Mubarak, y el rey Fahd, intervinieron para convencer al dirigente sirio, Hafez el Asad, de que aceptara las garantías norteamericanas. El presidente soviético Mijaíl Gorbachov también medió ante Asad.

Analistas políticos explicaron ese empecinamiento sirio en los aspectos formales por el deseo de sus responsables de no aparecer ante su opinión pública como que se han plegado a las condiciones norteamericanas desde el primer momento. La presencia aún en Madrid, 24 horas después de que estuviera prevista su partida, del ministro sirio de Exteriores, Fartik al Shara, indicaba que no se habían agotado todas las posibilidades.

Siria rechazaba pasar a la segunda fase de las conversaciones porque, en su opinión, Israel no había aceptado el principio de paz por territorios en la, primera etapa de la Conferencia. Así lo explicó el portavoz de la delegación, Sujair Yanán, en un comunicado leído ante los informadores a las puertas del hotel Ritz, una hora después de su incomparecencia.

"Accedimos aparticipar en esta Conferencia en el entendimiento de que se haría sobre la base de las resoluciones 242 y 338 de la ONU, es decir, el principio de paz por territorios. Tras llegar a Madrid, la delegación siria se ha dado cuenta de que Israel quiere trasladar las negociaciones a la región [Oriente Próximo] y limita las conversaciones a ese asunto, lo que no podemos aceptar", justificaba la nota siria.

Eran las 10.05 de la mañana cuando el Mercedes azul marino que trasladaba a Yosef Ben Aharon entraba en el palacete de la calle Duque de Rivas."Durante 35 minutos los informadores esperaron en vano la llegada de sus interlocutores sirios.

La incertidumbre se resolvió con la salida de los israelíes. "Son ellos los que han faltado, nosotros hemos venido y esperado durante más de media hora", constató ante los periodistas Ben Aharon. No obstante, el responsable israelí, que no ocultaba su satisfacción por la puesta en evidencia de la testarudez siria, descartó que el plantón significase el final de las negociaciones. Y efectivamente así fue.

Poco después, en una nueva comparecencia, Yanán cambiaba el tono y declaraba que estaban dispuestos a "participar en las conversaciones en las condiciones y tono acordado con los patrocinadores". A partir de ahí se confirmó su disposición a entrevistarse con los israelíes, aunque debieron pasar más de diez horas para que se hiciera una realidad;

Pasaban ya las diez y media de la noche, cuando la delegación siria llegó al Palacio de Parcent, en la céntrica calle de San Bemardo, de donde poco antes habían salido sus hermanos libaneses y sus interlocutores israelíes. Al frente de la delegación, Muafat al Allaf. Junto a Ben Aharon, tocado con una kipa azul, franquearon la entrada Yekutiel Mor, el número dos de los servicios secretos militares, Yigal Carmon, consejero del primer ministro en lucha antiterrorista, Meir Bar Zeev, del Ministerio de Exteriores, Amiram Maguid, portavoz de la Embajada en España, y Yosi Olmert, portavoz del Gobierno y experto en asuntos de Siria y Líbano. A la hora del cierre de esta edición, las delegaciones siria e israelí continuaban reunidas.