El Partido Liberal logra la mayoría en las elecciones legislativas de Colombia

El Partido Liberal, encabezado por el presidente César Gaviria, se hizo el domingo con la mayoría en las elecciones al Senado colombiano, la principal Cámara legislativa del país, al obtener, cuando se llevaba escrutado el 92% de los votos, 56 de los 102 escaños en juego. La jornada electoral, que transcurrió en relativa calma, no atrajo a la población, que en un 65% se abstuvo de acudir a las urnas.

La guerrilla no respetó la jornada de votaciones y mantuvo su ofensiva, aunque aislada, en varias regiones del país, con emboscadas a la policía que se saldaron con cuatro muertos y seis heridos.Además del Senado, los colombianos decidieron ayer la composición de la nueva Cámara de Representantes (161 escaños, también con mayoría liberal) y eligieron por primera vez a los 27 gobernadores departamentales. En esta última elección, el Partido Liberal, cuando el recuento alcanzaba el 75% de los sufragios, se había hecho con 15 provincias, frente a otras 12 que se repartían varias coaliciones. La Alianza Democrática M19, consiguió el gobierno de la Guajira, al norte del país.

La hegemonía del Partido Liberal frente al resto de las fuerzas políticas que concurrieron a los comicios ha roto en cierto modo el bipartidismo y consolida a partir de ahora un nuevo mapa político más amplio, cuya redistribución tendrá su réplica en el nuevo Gobierno de Gaviria.

Los liberales basaron su éxito en el Senado en una peculiar estrategia electoral consistente en presentarse en todos los departamentos del país, en vez de concurrir en una lista única nacional como hicieron el resto de los partidos. La estrategia, bautizada con el nombre de Operación Avispa, fue montada como alternativa a las dificultades existentes para aglutinar en lista única a los barones del partido.

El movimiento conservador, que acudió a estas elecciones dividido, ha obtenido un 30% del Senado: los escaños se los han distribuido la Nueva Fuerza Democrática, con nueve; el Movimiento de Salvación Nacional, con cinco, y otros grupos afines, entre ellos el histórico Partido Social Conservador, con 15.

Los observadores destacan a la Nueva Fuerza Democrática, de Andrés Pastrana, hijo del ex presidente Misael Pastrana Borrero, como la fuerza emergente del movimiento conservador, actualmente dividido, ya que representa una opción más moderna y acorde con la política de cambios que se ha trazado el país. Además ofrece la novedad de que sus nueve senadores electos, incluido el propio Pastrana, son nuevos en la Cámara Alta.

Éxito de la vieja guerrilla

Una fuerza que se consolida como tercer movimiento político del país es la Alianza Democráticas M-19, que presentó al Senado como cabeza de lista a la ex guerrillera Vera Grabe, quien ha conseguido nueve senadores para su organización.

Durante la campaña se cuestionó mucho la posibilidad de éxito de los herederos del M-19 puesto que, al ser su líder Antonio Navarro Wolff, miembro de la Asamblea Constituyente, no podía presentarse a estas elecciones. Esta cuestión legal obligó al partido a buscarle un sustituto entre los cuadros directivos.

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