Hacienda plantea un nuevo recorte a la inversión pública de hasta un 30%

La polémica suscitada por el recorte del gasto público decidido antes del verano ha vuelto a reproducirse durante el debate de los presupuestos del Estado para el próximo año 1992. Las cifras presentadas el pasado miércoles por Hacienda a los secretarios de Estado de los demás ministerios vuelven a incidir sobre un recorte del 30% en la inversión pública para el año que viene.El objetivo es reducir al 1,5% del producto interior bruto el déficit público el año que viene, lo que situaría la diferencia entre los ingresos y los gastos del Estado en 900.000 millones de pesetas.

La propuesta de Hacienda, que hoy será perfilada por el Consejo de Ministros, ha provocado entre los segundos niveles de los ministerios un fuerte malestar. Incluso se han producido veladas amenazas de dimisión.

El fuerte recorte en la inversión pública compensará el crecimiento de los gastos sociales y del pago de intereses por la deuda.

El gasto público crecerá, sin embargo, dos puntos por encima de lo previsto para el conjunto de la economía, según se desprende de las cifras explicadas en la reunión. Los cálculos de Hacienda son que el gasto pasaría de los 13,5 billones de 1991 a una cifra cercana a los 15 billones para el próximo año, es decir, que tendría un incremento del 11% frente a un 9% de aumento para el conjunto de la actividad económica. Sólo los gastos financieros, es decir, los intereses de la deuda pública, aumentarán en medio billón de pesetas. Ello responde a una financiación "ortodoxa" del déficit en vez de recurrir al Banco de España. Página 33