_
_
_
_

Cossiga viaja a Albania para tratar de evitar un nuevo éxodo

El presidente de la República Italiana, Francesco Cossiga, llegó ayer a Tirana para tratar con su Gobierno sobre el masivo éxodo de albaneses hacia Italia y las consecuencias de esta inmigración clandestina en las relaciones bilaterales. El pasado lunes, el ministro de Asuntos Exteriores, Gianni de Michelis, prometió una ayuda a Albania de 115 millones de dólares (unos 12.420 millones de pesetas). Mientras tanto, en el estadio de Bari y, en su puerto se rinden poco a poco los últimos 500 refugiados que se resistían a ser repatriados. La policía ha afirmado que no está prevista la utilización de la fuerza para conseguir su embarque.La visita de Cossiga al país más pobre de Europa tiene como principal objetivo discutir con las autoridades de esa nación la ejecución de un programa de ayuda alimentaria que prevenga la masivas oleadas de desesperados que buscan un futuro mejor. Tres aviones con comida estaban disespuestos ayer para el despegue hacia Tirana tras la promesa del Gobierno italiano de garantizar en lo posible las necesidades más elementales de los albaneses entre los meses de septiembre y diciembre. Dos aviones más llegaron a Tirana el lunes. El propósito de este puente aéreo con comida es facilitar la recuperación del sector agrícola albanés, gravemente desatendido tras el abandono de las labores de cosecha por miles de campesinos. "Hemos pedido al Gobierno albanés que nos facilite una lista de lo que necesitan", informó un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores.

Doble ración de comida

En Bari, a últimas horas de ayer, la resistencia de los últimos albaneses se desmoronaba sin haber podido cumplir su deseo de permanecer en Italia, Francia, Alemania o cualquier otro país que los acepte. Sin embargo, consiguieron doble ración alimenticia, dos pares de pantalones vaqueros, dos camisetas, dos pares de calcetines, dos paquetes de cigarrillos y un billete de 50.000 liras (unas 4.000 pesetas). Según los datos suministrados por las autoridades policiales tras el recuerdo conseguido en la masiva deportación de días pasados, fueron 17.000 y no 11.000 los albaneses que arribaron a varios puertos italianos.Por otra parte, una delegación militar italiana tratará con las autoridades militares y fronterizas albanesas sobre cómo coordinar el trabajo de las patrullas marítimas y aéreas que intentarán evitar otras oleadas de refugiados. Será la primera vez desde la finalización de la II Guerra Mundial que Tirana permite la entrada en el país de un grupo militar occidental. Cossiga, por su parte, es el primer jefe de Estado que lo visita desde que el Ejército italiano se retiró de Albania en 1943. En Tirana, De Michelis aseguró que Italia no busca una vuelta a su pasada actuación en Albanía ni tratar a esta nación de tres millones de habitantes "como un protectorado o un hermano pequeño".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_