La huelga del Metro fue desconvocada una hora antes de que comenzase
Los paros convocados por los trabajadores del Metro para esta semana fueron anulados sorpresivamente a las seis de la mañana de ayer, tras el acuerdo alcanzado durante la noche entre la dirección de la empresa y los sindicatos convocantes de la huelga. Diez horas de negociación fueron suficientes para detener los paros, pero no bastaron para resolver uno de los dos problemas planteados: el cobro de las tasas de nocturnidad. A pesar de todo, los trabajadores decidirán el jueves otra huelga la próxima semana.
No obstante, las calles de la capital padecieron durante la mañana de ayer el efecto psicológico que causó sobre los automovilistas el anuncio de los paros en el Metro.El tardío acuerdo impidió a la prensa informar sobre la desconvocatoria de la huelga, con lo que los automovilistas sufrieron notables retenciones en las principales calles de la capital.
La situación en el tráfico se agravó con el suicidio de una mujer que se tiró desde un puente de la autovía M-30. El suceso ocurrió a las 6.15, y el juez no levantó el cadáver hasta una hora y media después.
Todas las entradas de Madrid presentaban problemas, especialmente las de La Coruña, Extremadura, Toledo y Andalucía. En el centro eran conflictivas las rondas tanto sur como este, Atocha, Santa María de la Cabeza desde la glorieta Elíptica, el enlace Cea Bermúdez, José Abascal y la M-30 en la zona este, sur y oeste.
"Graves coacciones"
Las causas que provocaron la huelga, según el comité de empresa, eran "las coacciones de Metro sobre los empleados que se dan de baja por enfermedad y el incremento de la tasa que se paga por las horas nocturnas de trabajo".Los sindicatos que componen el comité de empresa se quejan de que la compañía les envía un inspector médico a su casa cada vez que se dan de baja.
Tras 10 horas de reunión, la dirección de Metro, presidida por Guillermo Vázquez, aceptó archivar todos los expedientes abiertos por indisposiciones y crear otra propuesta sobre las bajas.
El director se comprometió también a no abrir nuevos expedientes mientras no se llegara a un acuerdo entre ambas partes. Este compromiso no es efectivo si se presentan más de tres indisposiciones al mes o más de 11 al año.
Alcanzado este punto relativo a las indisposiciones, los trabajadores decidieron desconvocar los paros de esta semana, pero anunciaron una asamblea para el próximo jueves, en la que se decidirá si las posibles discrepancias en lo referente a las tasas de nocturnidad son motivo suficiente para provocar una huelga.
Los paros que se anunciaron en la noche del lunes habían sido aprobados en una asamblea por 256 votos a favor, 12 en contra y 25 abstenciones. Metro tiene 6.000 trabajadores.
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