Estudiantes de otras autonomías pueden ocupar ahora el 90% de plazas universitarias catalanas

El presidente de la Generalitat catalana, Jordi Pujo¡, afirmaba el pasado año que "el distrito único será, en la práctica, un instrumento de descatalanización de las universidades catalanas". Con ello quería plasmar la oposición de su Gobierno al distrito compartido, cuya fase experimental pretende iniciar el Ministerio de Educación el próximo curso académico. Sin embargo, ya en la actualidad, y sin distrito compartido, el 90% de las plazas de primer curso de las licenciaturas que se imparten en Cataluña pueden ser ocupadas por estudiantes del resto de España o de un país miembro de la CE.

El sistema universitario de España está organizado en distritos académicos, uno por universidad, salvo en el caso de Cataluña y Madrid. Las universidades catalanas -Barcelona, Autónoma, Politécnica de Cataluña y Pompeu Fabra- y las madrileñas -Complutense, Autónoma, Politécnica, Alcalá de Henares y Carlos III- forman su propio distrito, coordinando institutos y las pruebas de acceso a la Universidad. A las facultades de estos distritos sólo puede accederse estudiando el Curso de Orientación Universitaria (COU) en un centro de la comunidad autónoma o demostrando que el aspirante reside en ella.No obstante, a algunos estudios con poca oferta en el conjunto de España, puede accederse desde cualquier otro distrito. Este es el caso de Ciencias de la Información y Óptica en Cataluña o de las Ingenierías de Aeronaútica y Montes, en Madrid. La residencia requiere, sin embargo, una cierta antigüedad: un año, en el caso de Madrid, y antes del 15 de abril del año en que se presenta la solicitud, en el caso de Cataluña.

Esta normativa permite que un estudiante madrileño que desee acceder el próximo curso 1991 / 92 a la facultad de Químicas de la Universidad de Barcelona, pueda hacerlo. El joven estudia COU y realiza las pruebas de selectividad en Madrid. Pero, con anterioridad al próximo día 15 de abril, se da de alta como residente en Barcelona. Automáticamente, este joven competirá en pie de igualdad con otro compañero catalán por una plaza en la facultad de Químicas de la Universidad de Barcelona, según han reconocido en la Oficina de Preinscripción Universitaria de Cataluña. Y podrá acceder a este centro si tiene mejor nota que su. compañero de Cataluña. Lo mismo ocurre con cualquier otro estudiante de un país miembro de la Comunidad Europea (CE). En este último caso, además de justificar la residencia con anterioridad al 15 de abril, deberá superar las pruebas de acceso a la Universidad que realiza la Universidad Nacional de. Educación a Distancia (UNED).

La normativa vigente permite esta situación. El decreto de 1986 que regula el acceso prevé una reserva del 40% de las plazas de primer curso para determinados aspirantes a ingresar en la Universidad. De este porcentaje, el 30% corresponde a los estudiantes procedentes de la formación profesional de segundo grado que deseen realizar una carrera corta -diplomatura-; el 5% para aquellos titulados universitarios que quieran comenzar una nueva diplomatura o licenciatura y, por último, igual porcentaje para los extranjeros procedentes de países con los que España tiene suscrito un convenio de reciprocidad. Estos últimos, mayoritariamente latinoamericanos, tiene el acceso prácticamente directo en cualquier centro de España.

Así pues, el 90% de las piazas de primer curso de las licenciaturas -el 60% en el caso de las diplomaturas, porque el 30% debe reservarse a los jóvenes procedentes de la formactón profesional- son ofertadas no sólo a los estudiantes de Cataluña, sino a aquellos del resto de España o de otros países comunitarios que acrediten la residencia en Barcelona con anterioridad al 15 de abril del año en que desean iniciar sus estudios.

Esta vía de acceso "tiene una incidencia prácticamente nula" en las universidades catalanas, según la Oficina de Preinscripción.