Expertos antiterroristas aconsejan a Occidente que vigile las embajadas de Jordania, Sudán y Yemen

Yigal Carmon, asesor en antiterrorismo del primer ministro israelí, Isaac Shamir, declaró ayer que los países occidentales deberían imponer reducciones de personal a las embajadas de Jordania, Sudán y Yemen, así como a las delegaciones de la OLP, siguiendo la pauta marcada por varios Estados en el caso de las embajadas iraquíes.Sólo la excepcionalidad de las medidas adoptadas explica, según Carmon, que las amenazas de ataques terroristas proferidas en los primeros días de la guerra no se hayan cumplido.

Carmon señaló también que los grupos palestinos de inspiración siria como el 17PLP-GC de Ahmed Jibril, Al Saika o la facción de Al Fatah dirigida por Abu Musha "no parecen haber participado en ataques terroristas desde que comenzó la guerra del Golfo". Esto demuestra, dijo, "que nunca ha habido una organización árabe terrorista activa que no haya estado apoyada o patrocinada por al menos un Estado árabe. En Oriente Próximo nunca existió una organización terrorista independiente". Añadió que ni Libia ni Irán son una preocupación importante en estos momentos, dadas sus posiciones en el conflicto.

100 atentados

Entre el 16 de enero y el 4 de febrero, expuso el asesor de Shamir, se registró un total de 100 atentados contra objetivos occidentales, casi todos en países del Tercer Mundo. De ellos, 64 fueron con bombas, 11 con armas cortas, 11 con cohetes RPG, ocho con cócteles molótov, ocho con fuego y otros nueve no especificados. El único muerto fue un terrorista que manipulaba su explosivo en Manila. Posteriormente, ha habido dos muertos en Perú y uno, de nacionalidad norteamericana, en Turquía. "Los hechos demuestran", dijo Carmon, "que, si se toman las medidas adecuadas, se puede cortar el terrorismo".