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LOS PRIMEROS PASOS DE LA ALEMANIA UNIDA

Constituido en Berlín el nuevo Parlamento alemán

JOSÉ M. MARTÍ FON, El viejo edificio del Reichstag, en Berlín, acogió ayer a los 662 diputados electos al Bundestag en las primeras elecciones generales de la Alemania unificada. Privada del interés de la votación de un Gobierno, que la pugna entre liberales y democristianos ha pospuesto hasta el próximo 13 de enero, la sesión de ayer fue esencialmente protocolaria.

La dimisión del ministro de Exteriores soviético, Edvard Shevardnadze, uno de los hombres que hicieron posible la unificación alemana, cayó como una bomba entre los parlamentarios. El canciller Helmut Kohl, con cara de circunstancias, se limitó a comentar que esperaba que la política de reformas de Gorbachov "sobreviva".Hans-Dietrich Genscher, el jefe de la diplomacia alemana, elogió a su homónimo soviético y recalcó su importantísimo papel "en el proceso de unificación de Europa y en la unidad alemana". El ex canciller Willy Brandt a sus 77 años el parlamentario de mayor edad, encargado de abrir la sesión, pidió al nuevo Parlamento alemán que, pese al arduo trabajo de reconstruir la antigua Alemania oriental, no olvide a los países del Este que salen de la dictadura comunista.

Brandt recordó en su discurso las dos fechas claves de las que la nueva Alemania se considera heredera: la asamblea de Francfort de 1848, conocida como la Paulskirche por la Iglesia en la que tuvo lugar, y la asamblea constituyente de Weimar de 1919.

La sesión de ayer, que con la excepción de la sesión especial que tuvo lugar el pasado 4 de octubre, al día siguiente de la unificación, es la primera que se celebra en el viejo Reichstag desde que Hítler fue elejido canciller en 1932, representaba el triunfo final del concepto de la Alemania Democrática y Federal, en contraposición al modelo autoritario y centralista representado por el sueño hegemónico prusiano y posteriormente por la locura hitleriana.

La democristiana Rita Süssmuth fue reelegida en su cargo de presidenta de la Cámara baja por una votación abrumadoramente mayoritaria, 5.25 votos a favor y 125 en contra.. El único posible contrincante, cuyo nombre había sonado en los últimos meses, el último presidente de la República Democrática Alemana, Lothar de Maiziere, se convirtió ayer en una de las estrellas de la jornada.

De Maiziere dimiti5 de todos sus cargos, entre ellos el de vicepresidente de la CDU, debido a que no ha podido probar la falsedad de las acusaciones que le hacían colaborador de la Stasi, la policía política del régimen comunista. Conservó, sin embargo, su acta de diputado.

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Su antecesor en el. puesto de jefe del ejecutivo de la RDA, el comunista Hans Modrow, también ha conseguido un acta de diputado.

Tanto Modrow como el presidente del Partido del Socialismo Democrático (PDS), el abogado Gregor Gysi, confiaban aún ayer que la Cámara hiciera una excepción alas reglas y les permitiera, pese a contar tan sólo con 17 diputados -menos de la mitad de los necesarios- poder formar su propio grupo parlamentario. Esto significaría un importante impulso político, tanto en la disponibilidad de fondos públicos como en su presencia real en el Bundestag.

Los tres partidos que forman la coalición gobernante (CDU, CSU y FDP) y que discuten ahora la composición y el programa del nuevo gabinete, han decidido abrir una tregua hasta el próximo 7 de enero y pasar las Navidades en paz.

Según informó el portavoz saliente del Gobierno, Hans Klein, que pretende obtener ahora la presidencia del grupo parlamentario de la CSU bávara, la votación del Gobierno será el 13 de enero.

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