La Junta de Castilla y León restaura en solitario la catedral de Segovia

La dirección general de Patrimonio de la Junta de Castilla y León va a emprender unas importantes obras de restauración en la catedral de Segovia, una de las realizaciones más singulares del patrimonio arquitectónico que sintetiza el momento histórico de transición entre el mundo medieval y el moderno, construida en el gótico tardío en base a un proyecto del arquitecto Juan Gil de Ontañón.Debido al progresivo deterioro del primer templo segoviano, la Comunidad de Castilla y León ha optado por llevar a cabo las obras en solitario, invirtiendo una cantidad próxima a los 500 millones de pesetas. Según José Miguel Merino de Cáceres, uno de los tres arquitectos que ha elaborado el proyecto de restauración, por el momento, estas obras no se van a incluir en el plan de catedrales que tiene previsto poner en marcha el Ministerio de Cultura en colaboración con las comunidades autónomas y los cabildos. catedralicios.

Para Merino de Cáceres, las obras en la catedral de Segovia son muy urgentes, ya que se están desprendiendo constantemente pináculos y balaustradas de piedra caliza con peligro, incluso, para los peatones; y la negociación del plan de catedrales entre las administraciones implicadas "va demasiado lenta", ha matizado el arquitecto.

El proyecto de restauración que, junto con Merino de Cáceres, ha sido redactado por los arquitectos Juan Antonio Espejel y Eduardo Navarro, consta de cinco fases, debido a la complejidad del edificio y al enorme volumen del mismo. La primera fase, cuyas obras comenzarán en el plazo de mes y medio o dos meses, afecta a 1.826 metros cuadrados de superficie y tiene un presupuesto de unos 100 millones.

De acuerdo con el proyecto, la primera fase contempla la in-tervención en la cabecera del templo, la más deteriorada, abarcando la parte comprendida entre el crucero y la línea exterior del ábside. Aparte de la restauración de la catedral, los técnicos están estudiando la elaboración de un plan director del templo donde se establezca un futuro programa de conservación y utilización del edificio.