El homenaje a Benjamin recordó a las víctimas del nazismo

La conmemoración del cincuentenarlo de la muerte de Walter Benjamin, ayer en Port-Bou, se convirtió en un homenaje a todas las víctimas del nazismo. El acto central consistió en la presentación del proyecto del escultor israelí Dani Karavan, que ha ideado tres esculturas en los alrededores del cementerio de la pequeña villa catalana, en memoria del intelectual desaparecido en 1940.El acto estuvo presidido por el consul alemán en Barcelona, Karl Gansátier, y el embajador israelí en España, Shiomo Ben Ami, quienes en sus intervenciones recordaron a las numerosas víctimas del nacional socialismo. Según afirmó el cónsul, el monumento a Benjamin en Portbou será financiado por el nuevo gobierno de la Alemania unida, en una de sus primeras aportaciones en materia de cultura.

La idea de Karavan está basada en la filosofía de Benjamin. La pieza central del monumento, bautizado con el nombre de Passagen, será una gran escalera, justo a la entrada del cementerio, cuyos muros se irán alzando a medida que se acerque al mar. Junto a la escalera el escultor aprovechará un desnivel del terreno para situar allí una zona de reposo con bancos para los paseantes y algunas citas en la pared de libros de Bernjamin.