Butros Gali: "Egipto apoyará una acción militar si lo decide la ONU"
Egipto, a la cabeza del bloque árabe que ha condenado la invasión iraquí de Kuwait, se encuentra enfrentado a las contradicciones internas de una región en continua ebullición. Con todo, su ministro de Estado para Asuntos Exteriores, Butros Gali, apuesta por la moderación y el diálogo. Este viejo zorro de la diplomacia egipcia, con 13 años en el puesto, no ha perdido la esperanza en la negociación. "Seguimos intentando encontrar, a través de contactos extremadamente discretos, de forma directa con Irak, y con otros países árabes, una solución pacífica al conflicto.Pregunta. ¿Cuál es el camino para solucionar la crisis?
Respuesta. Hemos buscado una solución en el seno de la Liga Arabe. La cumbre se reunió y tomó una decisión. También lo ha hecho el Consejo de Seguridad de la ONU. Y nosotros vamos a contribuir a la puesta en práctica de esas decisiones. Egipto promueve el diálogo para la solución pacífica de los conflictos. Creemos que éste es el único método tanto dentro como fuera del mundo árabe. La era de la posguerra fría ha reforzado nuestra posición de que lo más importante es la paz.
P. A pesar de ello, si, en el peor de los casos, se produjera la intervención norteamericana, ¿ustedes la apoyarían?
R. Apoyaremos las resoluciones del Consejo de Seguridad. Creemos que es importante que la -seguridad colectiva funcione a través de la Carta de la ONU Y que, si hay una intervención, sea en ese marco. Y es muy importante para nosotros, Estado pobre del Tercer Mundo, -reforzar a la ONU. Durante la guerra fría, los Estados del Tercer Mundo podían jugar con el enfrentamiento Este-Oeste. Hoy, el nuevo juego, no para sacar provecho de él, sino para intentar un mínimo de presencia, sólo es posible a través de la ONU, que representa el sistema más democrático, porque permite la participación de los países que corren el riesgo de quedar marginados por el acercamiento Este-Oeste.
P. ¿Cuáles van a ser las repercusiones de este conflicto para Egipto y el mundo árabe en general?
R. Va a debilitar al mundo árabe, que, en lugar de ocuparse del problema de la integración económica o de la cooperación interárabe, va a encontrarse dividido. Esto es grave en especial con vistas a 1992, que significa que al otro lado del Mediterráneo ustedes van a tener una unidad económica total. En la ribera norte habrá prosperidad, desarrollo económico y estabilidad, en tanto que en el sur, inestabilidad y subdesarrollo. Conflictos como éste entre Irak y Kuwait contribuyen al levantamiento de un nuevo telón de acero, entre el Norte y el Sur.
P. Los medios de comunicación egipcios se han lanzado a una verdadera campaña de propaganda contra Irak. ¿No complica eso las cosas?
R. Lamentablemente, nuestra Prensa es libre. Yo no comparto en absoluto su punto de vista.
P. El semanario económico Al A hram al Iqtasadi recoge un rumor bastante extendido en El Cairo. Según la revista, Irak ofreció a Egipto una importante suma de divisas para que cerrara los. ojos ante su invasión de Kuwait.
R. No tengo ninguna información al respecto.
P. Egipto tenía más de un millón de emigrantes en Irak y unos 200.000 en Kuwait cuando se produjo la invasión. Unos 35.000 se encuentran atascados en el puerto jordano de Aqaba. ¿Es cierto como ha anunciado la televisión israelí, que han pedido permiso a Tel Aviv para que pasen por Eilat?
R. No. Ha sido uno de los proyectos que hemos estudiado, pero al final se ha optado por el envío de aviones a la frontera jordano-iraquí para aligerar su regreso y evitarles 650 kilómetros de carretera. De todas formas, tampoco hubiera tenido nada de extraño, ya que los turistas israelíes pasan a diario por esa frontera.
P. El hecho de que Sadam Husein haya llamado a la liberación de los Lugares Santos del islam, ¿no puede atraerle la simpatía de las masas musulmanas, siempre dispuestas a la guerra santa?
R. Sí, pero si se les explica que los Santos Lugares se encuentran en el mar Rojo y que la disputa se produce en el Golfo, y que hay cerca de 1.000 kilómetros de distancia entre esos dos lugares, comprenderán que se trata de simple propaganda.
P. ¿Cómo interpreta el apoyo popular al presidente iraquí entre los pueblos del mundo árabe?
R. Es muy artificial y limitado. Salvo en el caso de los palestinos. Para ellos, esta nueva crisis ha relegado a un segundo plano su problema. Esto ha reforzado las posturas de los radicales, que piensan que la confrontación es el único medio de solucionar la cuestión palestina, porque el proceso de paz no ha dado resultados. Tampoco la Intifada ha conducido a la paz. El conflicto debilita a los partidarios del diálogo con Israel.
P. ¿Qué espera a Arafat tras su apoyo a Bagdad frente a las monarquías del Golfo?
R. No ha tomado partido por Bagdad, sino que ha intentado mediar. Además debe cuidar de su opinión pública, y en el interior de los territorios ocupados, la población se ha mostrado a favor de Sadam Husein.
P. ¿Está en peligro el liderazgo que Egipto iba a recuperar en el mundo árabe, con el retorno de la Liga Árabe a El Cairo?
¿Qué queda de ello ahora?
R. El papel de Egipto es inherente a su posición geoestratégica, a su peso demográfico -uno de cada tres árabes es egipcio- y a su importancia cultural y política. Son elementos fundamentales que no cambian con la coyuntura. La fuerza intrínseca de Egipto hace que su papel de líder vaya a continuar en esta región.
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