Los terroristas de la RAF declaran la guerra a la unificación alemana

La organización terrorista alemana Fracción del Ejército Rojo (RAF) anunció ayer una guerra sin cuartel contra la unificación alemana que, afirma, se convertirá en un "cuarto Reich" fascista, y reiteró su decisión de luchar en apoyo de los miembros de los GRAPO presos en España.

En una carta enviada a diversos medios informativos en Bonn, la RAF reivindicó el atentado contra el secretario de Estado del Ministerio federal del Interior, Hans Neusel, que resultó herido leve el 27 de julio al estallar una bomba al paso de su automóvil.

En un primer comunicado hallado cerca del lugar del atentado, la RAF indicaba que éste forma parte de una campaña de apoyo a los presos de la organización terrorista española y adjudicaba la acción al comando José Manuel Sevillano, nombre de un miembro de los GRAPO fallecido a causa de una huelga de hambre en mayo pasado.

Según la carta de la organización terrorista, Neusel es un destacado representante del "fascismo alemán desde el Tercer Reich hasta la Gran Alemania que quiere construir el Cuarto". La RAF declara la guerra al proceso de unificación alemana que previsiblemente concluirá en diciembre con las elecciones conjuntas en la RFA y la RDA.

La RAF Acusa a la RFA y a la nueva élite del poder" en la RDA de "perseguir con la reconstrucción de la Gran Alemania los mismos fines y planes imperialistas del fascismo nazi".

Varios miembros de la RAF que eran buscados desde hace años por diversos crimenes fueron localizados y detenidos en la RDA, donde el antiguo régimen comunista les había dado refúgio. El ex ministro de la Seguridad del Estado Erich Mielke ha sido detenido por su apoyo a este grupo terrorista.

El grupo terrorista alemán invita a otras fuerzas de lo que denomina el "frente antiimperialista de Europa occidental" a que se unan a las exigencias de los presos españoles y al proceso de "crear un contrapoder" en Europa para realizar una "intervención armada conjunta".

Según el comunicado, Neusel fue elegido como objetivo por ser uno de los impulsores de las Reuniones de Trevi, en las que los ministerios del Interior europeo occidentales coordinan su política de seguridad, y concretamente la lucha contra el terrorismo, el narcotráfico y otras formas del crimen organizado transnacional. Su importancia ha aumentado significativamente desde que comenzó las apertura de las fronteras internas en la CE. Estos encuentros establecen la política a seguir por la "bestia europea occidental", a la que la RAF considera corresponsable de la muerte del miembro de los GRAPO, si bien la responsabilidad última recae, añade, sobre el Gobierno español.