Un organismo israelí denuncia que menores palestinos son apaleados sistemáticamente

Menores palestinos recluidos en centros de detención israelíes son regularmente apaleados, humillados, encerrados en celdas estrechas y, generalmente, maltratados antes, durante y después de los interrogatorios, conducidos por agentes de los servicios de seguridad (Sin Beth). Éstas son las conclusiones de un informe, que acaba de hacerse público, de Betselem, Centro de Información Israelí sobre Derechos Humanos.

El estudio se basa en testimonios de abogados, prestados bajo juramento, que hacen referencia a 18 14 adolescentes palestinos, entre 13 y 17 años, detenidos e interrogados por la policía y el Sin Beth, antes de su procesamiento, entre 1989 y 1990."La mayor parte de los jóvenes detenidos relataron que fueron golpeados, con puños, porras y barras de hierro, así como que les arrancó el pelo y se les pegó con la cabeza contra el suelo o las paredes", se señala en el informe.

Dos celdas de aislamiento minúsculas -conocidas, por su forma y tamaño, como la tumba y el armario- fueron utilizadas a menudo para "romper la resistencia de los jóvenes palestinos que se negaban a firmar confesiones o denunciar a sus compañeros".

El año pasado, y éste, 39 adolescentes fueron encerrados en celdas con capacidad máxima para 12 detenidos, en violación directa de un mandato del tribunal supremo israelí.

En el curso de los interrogatorios, los jóvenes eran amenazados con represalias contra sus familiares: destrucción de casas y expulsiones. Al final, tras largas horas, debían firmar confesiones redactadas en hebreo, aunque fuesen incapaces de leer en esta lengua.

Un portavoz de la policía explicó que la mayor parte de los agentes investigadores hablan árabe, pero no lo escriben. "El árabe es lengua oficial en Israel, junto al hebreo", recuerda el informe del centro.