Grave crisis en el SPD por la oposición de Lafontaine al tratado de unión alemana
, La oposición de Oskar Lafontaine, el candidato socialdemócrata a la cancillería de Bonn, al tratado para la unificación económica, monetaria y social entre las dos Alemanias ha abierto una grave crisis en el seno de su partido que amenaza con descabalgar a Hans-Joachim Vogel de la presidencia del SPD si las bases de¡ partido y los miembros de su grupo parlamentario, que apoyan respectivamente al primero y al segundo, no consiguen antes llegar a un acuerdo.
Las declaraciones de Lafontaine al semanario Der Spiegel, en las que aconseja a su partido votar a favor del tratado en el Bundesrat, la Cámara territorial en la que cuenta con la mayoría, y hacerlo en contra en el Bundestag, la Cámara baja controlada por la coalición democristiano liberal que ocupa el Gobierno, ha conseguido dejar aún más perplejos a los socialdemócratas.Sus protegidos al otro lado del Elba, el SPD alemán oriental, que forma parte del Gobierno de gran coalición que negocia la unión entre las dos Alemanias, se encuentran también entre la espada y la pared ante la opción tomada por Lafontaine, recién recuperado del atentado que estuvo a punto de costarle la vida hace poco más de un mes.
Richard Schroeder, presidente del grupo parlamentario del SPD en Berlín Oriental, pidió ayer a Lafontaine que no permitiera que la socialdemocracia pasara a la historia "como el partido que se opuso a la unidad alemana".
Pese a que el ministro presidente del Sarre y único candidato con ciertas posibilidades de enfrentarse al canciller Helmut Kohl, se ha labrado a pulso una fama de jugador arriesgado, y a que sus apuestas políticas le han salido bien hasta la fecha, su decisión de frenar la unión entre las dos Alemanias no acaba de ser entendida por los políticos socialdemócratas. Todo lo contrario sucede con las organizaciones de base, más dispuestas a apostar por el dinámico Lafontaine y aprovechar la ocasión para desembarazarse de la vieja guardia del SPI), personalizada en Vogel, que ha llevado a la socialdemocracia a una larga travesía del desierto desde que el canciller Kohl se hiciera con el poder en 1982.
Por su parte, el primer ministro de la RDA, Lothar de Maiziere, y el canciller de la RFA, Helmut Kohl, se entrevistaron ayer en Berlín Oeste para estudiar los detalles del acuerdo de unión monetaria, económica y social de las dos Alemanias.
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