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Un grupo ecologista ha recogido este mes varios cientos de kilos de pilas usadas en la región

Luz Sánchez-Mellado

La próxima semana concluye la campaña de recogida de pilas usadas que, organizada por la Coordinadora Madrileña de Defensa de la Naturaleza (Comaden), se está llevando a cabo durante todo este mes en 30 municipios de Madrid. Según las cifras facilitadas por este colectivo, miles de madrileños han depositado sus pilas usadas en los 100 puntos de recogida, distribuidos estratégicamente en locales del ramo eléctrico, supermercados y ferreterías.

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Los autores de esta iniciativa pretenden conseguir un aumento de la responsabilidad ecológica de los ciudadanos de Madrid a la luz de un dato escalofriante confirmado por la Dirección General de Medio Ambiente: una sola pila alcalina es capaz de contaminar un volumen de agua potable superior al consumido por un hombre durante toda su vida.Comaden demanda de las empresas fabricantes de pilas que disminuyan los niveles de mercurio y de cadmio en sus productos y especifiquen debidamente en las propias pilas la composición y el grado de peligrosidad ambiental de los elementos que contiene la batería para orientar a los consumidores

El colectivo exige asimismo de la Agencia del Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid la elaboración de un plan de recogida selectiva de residuos tóxicos y peligrosos de origen doméstico "que acabe con el caos que reina en este momento, en el que los ciudadanos, llevados por su falta de información adecuada, echan a la bolsa de la basura de casa todo tipo de desechos, que, como las pilas usadas, no siempre son inocuos o degradables", afirma Pachi Suárez, portavoz de este grupo ecologista.

En pueblos de la región

Este colectivo considera "insuficiente y poco eficaz" el programa piloto de recogida de pilas usadas puesto en marcha recientemente por la Agencia del Medio Ambiente, "ya que tan sólo ha instalado dos puestos de recogida en dos municipios de la región", dice Suárez.Sin embargo, los integrantes de este grupo ecologista han decidido no instalar puntos de recogida de baterías en Madrid ciudad "porque le damos un voto de confianza a Esperanza Aguirre, concejala de Medio Ambiente, que ha prometido tomar medidas de información a los ciudadanos para evitar el desecho indiscriminado de pilas", añade el portavoz de Comaden.

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Un informe de la Dirección General del Medio Ambiente del Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo señala que de los tres tipos de pilas que se comercializan hoy en el mercado -salinas, alcalinas y de botón-, tan sólo las salinas pueden eliminarse junto con el resto de residuos domésticos.

El resto de baterías, las alcalinas y las de botón que no se an de litio, deben ser desechadas aisladamente y en contenedores especiales para evitar el alto riesgo de contaminación que se deriva de la posibilidad de que la pila se deshaga o se derrame su contenido en cadmio o mercurio llegue al agua de ríos, mares por la acción del hombre o de los agentes atmosféricos.

Según los datos manejados por Comaden, un tercio de los madrileños analizados tiene en su organismo una cantidad de mercurio superior a los niveles de riesgo de envenenamiento. El colectivo ecologista piensa utilizar las pilas recogidas durante este mes de mayo para organizar un acto de protesta ante la sede de la Agencia del Medio Ambiente.

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Sobre la firma

Luz Sánchez-Mellado
Luz Sánchez-Mellado, reportera, entrevistadora y columnista, es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense y publica en EL PAÍS desde estudiante. Autora de ‘Ciudadano Cortés’ y ‘Estereotipas’ (Plaza y Janés), centra su interés en la trastienda de las tendencias sociales, culturales y políticas y el acercamiento a sus protagonistas.

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