Campaña anticomunista
Tras su reciente visita a Checoslovaquia, el pasado 21 de abril, hemos podido comprobar como el Papa se ha sumado a la campaña anticomunista. No se podía esperar menos de un Papa con tan poco sentido social. En el discurso que pronunció en este país hizo una crítica implacable de los regímenes comunistas. Para él no ha habido nada bueno en el legado que habían dejado en los países en los que habían gobernado; los logros sociales que algunos de estos Gobiernos consiguieron no contaban para nada. También él optó por el capitalismo, sistema que, al parecer, no considera materialista; pero, para él, una ideología que propugna la igualdad social es materialista., Es cierto que los regímenes comunistas han cometido atrocidades enormes, pero, por poner un ejemplo, el dictador chileno Augusto Pinochet también cometió graves violaciones de los derechos humanos, y, sin embargo, le dio la bendición. Pero, al comunismo no se le pueden reconocer unos pocos logros de carácter social. La diferencia radica en que Pinochet cree en Dios, y seguramente Honecker no, y el Papa presenta su división en creyentes buenos, no creyentes malos.Igualmente parece que al Papa le estorba cualquier persona que tenga algo de sentido social. Llamo la atención a los jesuitas de América Latina, entre ellos se encontraba Ellacuría, e igualmente me parece que excomulgó a Ernesto Cardenal porque marchó a luchar contra la dictadura somocista; si hubiera luchado contra una comunista, le hubiera propuesto para santo. El Papa debería tener un poco más de sentido social y dar menos importancia a las creencias, porque si, como dijo en Checoslovaquia, había que luchar por romper los muros que separan a los hombres, la religión es uno de ellos.-
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