Las Comunidades Cristianas Populares afirman que la LOGSE privilegia a la Iglesia
La coordinadora estatal de Comunidades Cristianas Populares ha hecho público un documento en el que se pronuncia sobre algunos aspectos de la futura ley de Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE). El texto expresa que "la Iglesia sale excesivamente privilegiada" del tratamiento que el proyecto legislativo da a la asignatura de religión y moral católicas. El documento sale a la luz pública cuando la jerarquía ha criticado duramente el proyecto de ley.
La intención de las comunidades de base de toda España no es, según afirman, la de entrar "en polémica con otros católicos, sino manifestar el legítimo pluralismo que existe en la comunidad creyente cuando se plantean temas políticos en los que, aun estando en juego intereses éticos y religiosos muy importantes, el Juicio está condicionado por la concreta visión de la realidad".La nota surge a raíz de las declaraciones de destacados representantes de la jerarquía episcopal. Este fin de semana, por ejemplo, el arzobispo de Burgos, Teodoro Cardenal afirmaba al respecto: "Quieren hacernos retroceder a un anacrónico totalitarismo de la escuela única". El documento no menciona las diversas manifestaciones habidas al respecto, salvo en el caso de la carta remitida por Javier Martínez Fernández, obispo auxiliar de Madrid-Alcalá, para ser leída el pasado 25 de marzo en las parroquias de la archidiócesis. El texto del obispo aseguraba que la nueva ley pretendía hacer un nuevo confesionalismo de tipo estatalista.
Los cristianos de base consideran que el proyecto de ley hace referencias "tal vez demasiado genéricas y tímidas" a valores como la solidaridad o los derechos y libertades. No obstante, apuntan que los católicos "no pueden pretender un monopolio ni mucho menos presumir que unas referencias verbales a supremos valores o instancias sagradas son la garantía de tina calidad ética".
La asignatura de religión y moral católicas, uno de los puntos en los que hace hincapié el episcopado, es abordada también en el texto de los cristianos de base. Éstos opinan al respecto que "se debería prescindir del carácter confesional y de la designación de profesores pro aprte de la jerarquía". Por ello apuestan por una asignatura de contenido cultural no confesional que pueda ser tratada por cualquier profesor con "alto nivel cultural, neutralidad y respeto a todas las religiones. Nos hubiera gustado", añaden, "que por un nuevo acuerdo de la jerarquía y el Estado se hUbiera llegado a este tipo de solución".
El proyecto de la LOGSE, sin embargo, "se ha reducido a respetar la imposición concordada [en los acuerdos Estado español-Santa Sede] de ofrecer libremente, a los alumnos que lo deseen, la clase de religión católica, con profesores elegidos por la jerarquía y retribuidos por el Estado". "Opinamos que de esta forma la Iglesia sale en el proyecto de ley aún excesivamente privilegiada", añaden. "Preferiríamos que se renunciara incluso a este derecho concordado; porque la Iglesia", continúan, "debe aparecer en pie de igualdad no sólo donde es minoritaria, sino donde es mayoritaria".
Asignatura alternativa
La Iglesia, arguyen los cristianos de base, "no debe cargar a los alumnos con una nueva asignatura [alternativa] para que no queden vacías las clases de religión". La nota se refiere, asimismo, a la libertad de elección de centro, tema que preocupa a la jerarquía.Los colectivos de base consideran que el Estado debe primar la oferta pública sobre la libertad de elegir centro, "sobre todo cuando el llamado pluralismo tiende en la práctica a reproducir el clasismo y la falta de igualdad de oportunidades". En el documento se señala que este debate ya surgió con la Ley Orgánica del Derecho a la Educación (LODE).
