Madurez anticipada

El pianista Bernd Glemser llegó a Barcelona con un programa compuesto por obras de Schumann y Rachmaninov, en el que hizo gala de una imaginación sonora de primer orden y una claridad en sus conceptos de superior musicalidad, que le otorgan valores singulares.A los 27 años, Glemser es capaz de lograr una Fantasía opus 17 de gran madurez y, hondura, o de extraer de esas pequeñas joyas pianísticas que son la Elegía o los Preludios en sol mayor, sol menor y do sostenido menor, de Rachmaninov, la característica sensibilidad nacida al roce con el teclado pianístico. Es música plena de valores expresivos a partir de un pensamiento netamente instrumental.

Como en Moscú, Montreal, Sidney, Tel Aviv, Munich o Madrid, Glemser triunfó en Barcelona por su dominio técnico, su cálida y estilizada comunicatividad y su naturaleza de intérprete creativo que sabe hacer versiones personales e intransferibles.