El reparto del pastel
El conjunto de ayudas y subvenciones públicas, que alcanzó en 1989 los 1,17 billones de pesetas, supone casi un 13% del gasto público. Si a esta cifra se añaden los fondos recibidos de la CE -475.000 millones de pesetas- el gasto en subvenciones y ayudas públicas alcanza el 18%. Sobre los 1,17 billones de pesetas, la mayor cuantía corresponde a los fondos obtenidos por empresas y otros entes públicos (593.827 millones de pesetas), según datos de la Intervención General de la Administración del Estado. De ellos, los mayores fondos han sido destinados a Renfe, que recibió 317.663 millones de pesetas, seguida de Hunosa que obtuvo 43.704 millones y el INI (32.000 millones). Las subvenciones a empresas privadas alcanzaron el pasado año los 177.621 millones de pesetas, un 42,5% menos que el año anterior. De ellos, 31.975 millones se destinaron a subvenciones corrientes y de éstas casi la mitad-14.945 millones de pesetas- corresponden a la ayuda obtenida por las concesionarias de autopistas para subvencionar la diferencia en el tipo de cambio por su endeudamiento en divisas.El resto de las subvenciones corrientes a empresas privadas no superan en ningún caso los 4.000 millones de pesetas. Las más destacadas son las asignadas a la existencia económica extraordinaria a trabajadores, a empresas afectadas por las diferencias de precios o por compensación de costes de producción y al transporte marítimo y aéreo de mercancías entre la Península y Canarias.
En cuanto a las subvenciones de capital a empresas privadas destacan las primas a la construcción naval (41.154 millones de pesetas), el doble que lo dedicado el año anterior; al sector siderúrgico (31.369 millones de pesetas), y a planes de reconversión y reindustrialización (13.958 millones). En cuanto a las subvenciones a particulares y entidades sin fines de lucro (432.749 millones de pesetas), destacan las concedidas a los centros de EGB (136.261 millones), becas (38.167 millones) y formación profesional (25.326 millones).
El Ministerio de Justicia subvencionó a la Iglesia Católica con 14.258 millones de pesetas y al Consejo de la Abogacía con 4.434 millones de pesetas. El Ministerio de Trabajo destinó a los Fondos de Promoción de Empleo 22.768 millones de pesetas y el Ministerio del Interior destinó a los partidos políticos 9.121 millones de pesetas.
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