Los 'doce' se resisten a que la Agencia del Medio Ambiente sea un órgano de control
ENVIADO ESPECIAL, El pleno del Parlamento Europeo decidió ayer en Estrasburgo devolver para su estudio en comisión las propuestas de enmienda sobre la Agencia Europea del Medio Ambiente. El comisario Carlo Ripa di Meana dejó muy claro ante la Cámara que los doce no aceptan transformar esa oficina de recogida de datos en un organismo de control de la política sobre medio ambiente.
España es el país que ha manifestado su rechazo a aceptar tina policía verde, aunque Italia, Bélgica, el Reino Unido e incluso Francia se ocultan detrás de la posición española para salvaguardar sus intereses. Casi nadie quiere renunciar a sus competencias nacionales. El Gobierno español subordina la prioridad de la protección del medio ambiente a la corrección de la diferencia de desarrollo, a lo que se añade el descontento que existe por el hecho de que la CE se centre en las lluvias ácidas y olvide la desertización y erosión, "que son, acaso, problemas más graves", según una fuente del Gobierno. España y Dinamarca son las candidatas más firmes para sede de la Agencia.
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