Rosas para la voz
Autoridades, familiares y entidades musicales de la Comunidad Foral de Navarra homenajearon ayer en Roncal y Pamplona al tenor Julián Gayarre en el primer centenario de su muerte, ocurrida en Madrid el 2 de enero de 1890.
Gabriel Urralburu, presidente del Gobierno de Navarra, y el alcalde del pueblo de Roncal, localidad natal de Gayarre en la que está situado su mausoleo, depositaron la primera corona de una ofrenda floral constituida por 23 ramos depositados ante la tumba del cantante, entre las que se incluían dos coronas enviadas por Teresa Berganza y Plácido Domingo. Coros de toda Navarra y los conservatorios de música de Pamplona y Tudela estuvieron representados en el responso-homenaje durante el cual el Orfeón pamplonés, que sirvió de escuela de aprendizaje a Gayarre, interpretó pasajes del Réquiem de Verdi.
Por la tarde, en el teatro pamplonés que lleva su nombre, se celebró un concierto-homenaje a Gayarre que contó con la participación de José Carreras, el tenor navarro Iñaki Fresán y Marta Bayo, con la Orquesta Sinfónica de Madrid dirigida por José Collado.
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