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Renfe no paga las cuotas de formación a la Seguridad Social desde el año 1984

La Inspección de Trabajo de Madrid ha levantado dos actas de liquidación a Renfe por no ingresar las cuotas de formación profesional en la Seguridad Social desde 1984. El importe total del fraude asciende a más de 6.996 millones de pesetas. Según recuerda Comisiones Obreras, en 1984 la compañía cerró las escuelas de aprendices que la propia empresa gestionaba y financiaba con los fondos para la formación.

Renfe ha continuado descontando a sus trabajadores la cuota de formación profesional a pesar de que no ha ingresado esas cantidades en la Seguridad Social ni ha pagado la cuota empresarial por este concepto.Por tales razones, la inspección propone que la compañía ferroviaria no sólo abone las cantidades debidas sino que se le aplique una sanción "muy grave en su grado máximo" por un total de 15 millones de pesetas.

La Inspección de Trabajo basa esta sanción en "la negligencia e intencionalidad de la empresa infractora, el número de trabajadores afectados y la cantidad defraudada". En el término de quince días desde que reciba la notificación, Renfe podra presentar ante Consejo de Ministros un escrito de descargo.

En el documento enviado a la compañía, la Administración destaca como "hecho más grave" que, entre octubre de 1984 y septiembre de 1989, Renfe ha descontado a sus empleados en cada mensualidad un porcentaje para la formación profesional. Esta cifra ascinde actualmente a 500 millones de pesetas, que no se han ingresado en la correspondiente oficina recaudadora.

A juicio de CC OO, esta actitud puede constituir delito. De hecho, la inspección ha notificado a la Jefatura Provincial de Trabajo y Seguridad Social, para su traslado al Ministerio Fiscal, que se exijan a Renfe reponsabilidades penales "por si los hechos que se describen fueran constitutivos de delito de apropiación indebida contemplado en el artículo 535 del Código Penal".

50.000 afectados

Trabajo entiende que el número de afectados oscila entre 50.081 trabajadores, plantilla actual, y las 67.181 personas que estaban empleadas en Renfe hace cinco años. La compañía ferroviaria ha venido reteniendo una cuota media de 1.000 pesetas al mes a cada uno de estos trabajadores desde el mes de octubre de 1984, con la excusa de establecer un fondo para la formación profesional.Este trámite de obligado cumplimiento no se ha llevado a cabo en este tiempo porque, según ha podido comprobar la Inspección de Trabajo, nunca se llegaron a ingresar estas cantidades en la Seguridad Social.

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