Presentadas las alegaciones sobre la censura de un vídeo de Santa Teresa

Los autores de Visions of ecstasy, el vídeo censurado en Londres por contener una escena erótica de un éxtasis de Santa Teresa con Cristo en la cruz, no pretendían atentar contra la fe cristiana ni contra el Redentor, como demuestra el delicado tratamiento del pasaje, según la defensa del caso. El censor discrepa y sostiene que la respuesta del crucificado a las caricias de la santa es blasfema y puede provocar la indignación de los creyentes. El Comité de Apelación de Vídeo ha escuchado durante dos días las alegaciones de ambas partes en este caso, el primero en la historia británica en que una película ha sido censurada por atentar presuntamente contra la ley sobre la blasfemia, y tomará una decisión la semana entrante.

Geoffrey Robertson, en nombre del director y productor del vídeo, insistió en se trata de "una exploración cinematográfica de un tema sobre el que se ha escrito mucho". Robertson manifestó que el pasaje controvertido es "lo más decente que se puede imaginar para simbolizar la unión mística con Dios".

James Ferman, director del organismo censor (BBFC), alega que el vídeo tiene todos los visos de "suscitar la indignación de los creyentes por el tratamiento despectivo dado a la divinidad de Cristo, hijo de Dios" y que ha de ser prohibido.