La Comisión Europea aprueba un programa de protección prioritaria del Mediterráneo

La Comisión Europea aprobó ayer el programa de protección de medio ambiente Envireg, dotado con 500 millones de ECU (65.000 millones de pesetas), para el período 1990-1994, y cuya "prioridad será la protección de las zonas costeras del Mediterráneo", según afimaron ayer los comisarios Bruce Millan y Carlo Rippa di Meana.

La decisión da una satisfacción parcial a España, que ha peleado por una política medioambiental de la Comunidad que "mire también hacia el Sur". El ámbito de aplicación del Envireg será el Mediterráneo y todas las regiones que reciben ayudas del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder). En el caso español, esta cobertura vinculada a la política regional de la CE impide financiar proyectos para Baleares.Las zonas mediterráneas recibirán un tratamiento preferencial. La CE pretende atajar, según Millan, "el deterioro provocado por un crecimiento rápido, turístico e industrial, que ha entrañado importantes concentraciones de población y una urbanización demasiado rápida".

El mar Mediterráneo está profundamente contaminado. En la costa, a los problemas de saturación demográfica se une la visita de 100 millones de turistas anuales y los efectos de la presión inmobiliaria e industrial. Las repoblaciones forestales no pueden compensar las más de 200.000 hectáreas de bosque que destruyen los incendios cada año, mientras la desertización y la erosión del suelo avanzan.

El programa no se ajusta al proyecto defendido por España cuando desempeñó la presidencia de la CE. Entonces el objetivo estaba en el plan MEDSPA, orientado a la recuperación medioambiental y a la lucha contra la erosión en las costas de España, Italia, Grecia y Francia, además de "la cuenca del Ebro y todo el territorio al sur del Tajo".

Ahora el MEDSPA, según el comisario Ripa di Meana, se ha convertido en una propuesta a elevar al Consejo de Ministros de la CE para las regiones no cubiertas por el Envireg. Su escasa dotación, 35 millones de ECUs (4.550 millones de pesetas), lo convierte además en un instrumento insuficiente.

La mayor ventaja será la co operación con la futura Agencia Europea del Medio Ambiente, un organismo de estudio y control, sobre cuya creación el Consejo de Ministros de la CE alcanzó anteayer un acuerdo político.