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Miles de fotografías salen a la luz en la Biblioteca Nacional

Una exposición conmemora 150 años de un arte y termina una larga clasificación

Con la inauguración, anoche, por el príncipe Felipe, de la exposición de fotografías que recoge lo más significativo de la colección de la Biblioteca Nacional concluye una labor de ordenamiento y clasificación que se ha prolongado durante varios años y que ha terminado con un "mito"', en palabras de la comisaría Isabel Ortega: el mito de unos fondos que nadie sabía muy bien en qué consistían ni su importancia. Ahora ya se sabe: la colección de 300.000 fotografías de la Biblioteca Nacional es quizá la mejor de España. La exposición se inaugura, como otras anteriores en Chicago y en París, en el 150º aniversario de la fotografía.

No hay daguerrotipos en la Biblioteca Nacional (placa de cobre que, en los orígenes de la fotografía, sólo servía para una sola copia), y esa es una de las carencias de la muestra, que en cambio exhibe varios calotipos, el primer sistema que permitía producir varias copias de una sola matriz.Según Isabel Ortega, comisaria junto con Gerardo Kurtz, la estructura de la exposición ayer inaugurada es reflejo de una guía inventario de los fondos de fotografía dé la Biblioteca Nacional-, elaborada durante los últimos años. La exposición también intenta mostrar los estrechos lazos que, desde el comienzo, unen a la fotografía con el libro, de modo que la muestra incluye colecciones de libros, en los que al principio las fotografías están pegadas, y después la impresión es conjunta.

Destaca la muestra representativa de la colección de 18.000 fotografias que reunió en el siglo XIX el pintor Manuel Castellano (realizaba sobre todo pintura historicista y taurina), que incluye álbumes con vistas de España, Italia y Oriente. Él no hacía las fotografías, sino que las coleccionaba.

La exposición, de varias salas, comprende unas 300 piezas (en ocasiones no se trata de fotografias, sino de libros de fotografias, de los que en la Biblioteca hay 2.000 clasificados), y la primera vitrina se remonta hasta 1839: allí se exponen las cinco traducciones que ese mismo año fueron editadas en España del histórico libro de Daguerre que se considera fundacional: Historia y descripción del daguerrotipo.

De acuerdo con el criterio de clasificación aludido, se muestran fotografías agrupadas según su colección original: por ejemplo, las provenientes de la Junta de Iconografía Nacional, que se propuso reunir todas las imágenes de personajes españoles, fuese cual fuese su soporte: óleos, dibujos, grabados y, naturalmente, fotografías. También las de los, fotos de La Ilustración española y americana, que obtenía fotos en un tiempo en que aún no era posible reproducirlas, con el objeto de copiarlas después. Sólo fue posible imprimir texto y foto a comienzos de los años ochenta del siglo XIX.

Cámaras oscuras

Siempre en el capítulo del interés histórico, la muestra incluye algunas obras de los siglos XVI, XVII y XVII que, de alguna forma, están relacionados con los estudios previos a la invención de la fotografía, como los experimentos con cámaras oscuras y demás. Destaca un grabado de 1.1509 de la cámara oscura utilizada para observar el tránsito de Mercurio frente al sol.Los expertos de la colección de la Biblioteca Nacional se encontraron con unas 6.000 fotografías de muy difícil clasificación, y así, por su dificultad, han sido agrupadas en la muestra; se exhiben 30 de ellas, seleccionados en función de los fotógrafos más frecuentes o los más importantes: entre ellos Laurent Clifford, José Martínez Sánchez, Etienne Cariat. Son vistas, retratos, y alguna fotografía más menos personal, de objetos.

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