Los rebelde afirman que tienen fuerza para ganar la batalla de San Salvador

Cuando la caravana de periodistas extranjeros llegaba en la mañana de ayer a uno de los puntos de Zacamil, decenas de personas con banderas blancas, muchos con niños en los brazos, corrían en dirección contraria por instrucciones de los propios guerrilleros que temían un ataque inminente.En uno de los bloques de pisos ocupados por el FMLN, los combatientes, todos ellos Jóvenes, estaban apostados en las ventanas y las escaleras, listos para repeler cualquier tiroteo. El comandante Amílcar llegó custodiado por una mujer y un hombre con el rostro cubierto con un pañuelo. Todos ellos iban armados con fusiles automáticos soviéticos AK. Los vecinos que no quisieron abandonar sus casas permanecían en las puertas con cierta resignación para sopoirtar lo que tenga que venir, de uno u otro lado.

Amílcar dijo que el momento de replegarse hacia, el interior del país no lo va a decidir el FMLN sino la población. "Tenemos la capacidad logística y militar para permanecer aquí mucho tiempo pero contamos con la población para que nos apoye con víveres. Estarnos recogiendo ahora el trabajo (le más de diez años", dijo el comandante guerrillero.

Tres noches sin dormir

Lejos de la presencia de las armas, algunos habitantes de la zona no parecen, sin embargo, tenerlo tan claro. Están exhaustos, llevan tres noches sin dormir por los bombardeos aéreos constantes; muchos tienen parientes heridos y una familia entera murió el domingo pasado al caer una bomba en su casa. Algunos comprenden las razones de los guerrilleros, pero quieren que se vayan. "Que se vayan porque llegan los aviones y, para levantarlos a ellos, nos pegan a nosotros", dice una mujer de 33 años que pide a sus cuatro hijos quedarse dentro de su casa con tejado de hojalata.

Otros echan la culpa de su situación al Ejército. "Una tanqueta paso ayer disparando a diestro y siniestro, mucho antes de llegar adonde estaban los muchachos", relata un hombre que muestra a los periodistas los impactos de bala. sobre la frágil pared de su vivienda. El Ejército afirma que hasta a hora han muerto 220 guerrilleros y 17 civiles, y han resultado heridos 180 guerrilleros y 86 heridos. El FMLN dice haber causado cerca de medio millar de bajas, entre muertos y heridos, a las fuerzas armadas. El tránsito de ambulancias es constante y los hospitales atienden a cientos de personas cada día.

"Queremos paz y comida", gritan por todos lados personas que han pasado la noche a la intemperie en Zacamil, huyendo de los guerrilleros primero, del Ejército después. Cientos de casas de esta zona han sido destruidas o desalojadas.

.La gente permanece hacinada bajo los techos que siguen en pie sin poder siquiera moverse en busca de alimentos. En otros sectores ocupados por el: FMLN la guerrilla izquierdista ha derribado.las puertas de supermercados y farmacias para que la gente tome lo que necesite.

El comandante Amílcar, de 23 años de edad, que dice tener bajo su mando a medio centenar de hombres, afirmó que la guerrilla decidió atacar San Salvador porque la capital es "el corazón del enemigo" y para "dar a conocer al inundo la posición del FMLN".

"Hasta ahora no hemos encontrado eco a nuestras ofertas de negociación; con esta ofensiva queremos demostrarle al Gobierno que estamos dispuestos a cambiar esta situación", manifestó.

Vigilante de 13 años

Junto a él, otro guerrillero se comunica por radio con Ios comandantes del puesto de mando". Una de las esquinas está vigilada por un niño de 13 años de edad y de la misma estatura que el fusil AK que lleva disparando desde hace año y medio. Su padre también es guerrillero y dice haberse incorporado al FMLN "porque no se puede aguantar este Gobierno".

En las venanas, otros militantes del FMLN disparan contra posiciones del Ejército en el momento en el que salen del bloque de viviendas los periodistas, que tienen que apartarse precipitadamente del camino por la aparición de un helicóptero. Los llantos, los gritos, los disparos hacen del lugar un escenario horrible.

Pero aún es peor en otra colonia cercana, Ciudad Delgado, donde se escuchan los bombardeos del Ejército y las respuestas de los lanzacohetes RPG de los guerrilleros. Es difícil calcular el número de la fuerza concentrada por el FMLN en la capital, pero fuentes diplomáticas aventuran la cifra de 1.500 combatientes.

Entre quienes luchan, según el Ejército, hay varios nicaragüenses y de otras nacionalidades. El coronel Ponce informó que había sido detenido un ciudadano de la República Federal de Alemania que conducía un camión cargado de explosivos y municiones. La radio oficial, la única en emisión, no cesa de acusar al presidente de Nicaragua, Daniel Ortega y al "movimiento comunista internacional" de lo que está sucediendo.