Mikel Laboa recoge diversos estilos en su nuevo disco

El cantante y compositor vasco Mikel Laboa presentó ayer en Bilbao un nuevo disco, su duodécima grabación individual. El álbum, titulado 12, continúa la trayectoria musical que Laboa inició bace 25 años, e incluye la pieza experimental Cherokee, varias canciones compuestas sobre poemas de Bertolt Brecht, Joseba Sarrionaindía y Bernardo Atxaga, y una versión de un tema instrumental del pianista norteamericano Thelonius Monk.

Mikel Laboa, de 54 años, vestido con jersey azul y pantalones vaqueros, con el rostro bronceado y el pelo canoso, ofrecía ayer una imagen similar a la que tenía años atrás cuando interpretaba las canciones bandera más coreadas en el País Vasco en los últimos años de franquismo y en la transición.Laboa afirmó que el nuevo disco contiene las tres líneas que siempre han estado en sus obras: Ia música tradicional vasca, la poesía de autores vascos actuales y los lekeitios".

Trabajo experimental

Laboa explicó que el trabajo experimental que desarrolla en la serie Lekeitio continúa presente en este disco por la confianza que le entrega el público y porque considera que está obligado a dar a conocer sus trabajos. "No es sólo experiemental sino vivencial",dice. "Los lekeitios tienen una estructura que sale del lenguaje convencional, formada por otrossonidos, gritos, movimientos de cuerpo que intentan una comunicación diferente". Cherokee, que es el octavo tema de la serie, incluye voces recogidas en directo en Lekeitio (Vizcaya) y en la localidad vascofrancesa de Larrain, y música de la tribu india.En 12 aparece el tema instrumental Round midnight, del pianista norteamericano de jazz Thelonius Monk. Laboa reconoció que Ios músicos que me rodean me llevan hacia el jazz".

La carpeta del disco está firmada por el pintor José Luis Zumeta, con quien ya ha colaborado Laboa en anteriores ocasiones. "El trabajo conjunto con artistas de otras disciplinas, como Zumeta o Atxaga, se produce sin planteamientos previos. Es producto de un contacto natural".

Laboa, psiquiatra infantil en ejercicio, grabó su primer disco en 1964. La censura y la falta de una infraestructura adecuada obligaron a publicar el trabajo en la localidad francesa de Bayona.

Pocos meses después inició su andadura el grupo cultural Ez dok hamairu (No somos trece), una organización de músicos y poetas, entre los que estaban, entre otros, Laboa, Benito Lertx'undi, Lurdes Iriondo, José Antonio Artze y Xavier Lete, unidos en el intento de impulsar la música vasca.

"El movimiento fue un revulsivo dentro de la dictadura franquista" recordó Mikel Laboa. "Nos servíamos de poemas para transmitir unas ideas que no sólo tenían contenido político", añadió el compositor vasco.