_
_
_
_

Auschwitz y las carmelitas

El nombre de Auschwitz significa cosas distintas para polacos y judíos. Para el cardenal de Varsovia, Josef Glemp, un patriota polaco, es un lugar donde los nazis mataron a muchos católicos polacos, junto con miembros de otros grupos y razas, incluidos judíos y gitanos. Para los judíos, Auschwitz es sinónimo de holocausto porque más de seis millones y medio de personas murieron allí. Sin embargo, un desafortunado conflicto ha roto las relaciones internacionales entre judíos y católicos.Es irónico que el centro de la tormenta sea una pequeña comunidad de monjas de la orden Carmelita, que rezan para obtener el perdón de Dios por los actos criminales del hombre contra el hombre. Éstas han ocupado un edificio en el campo de concentración. Quizá parezca natural para los católicos querer, orar en este terrible lugar, pero para los judíos es una grave intrusión dentro del simbolismo de Auschwitz. El martes, el cardenal Glemp tuvo la oportunidad, en su breve visita a Bristol, de explicar los acontecimientos latentes tras el conflicto. No utilizó palabras conciliadoras. De hecho, emitió algunas críticas de poco tacto de lo que los judíos denominan "teología Shoah". El nuevo Gobierno polaco tiene miles de problemas, pero parecía que comprendía el caso judío. El cardenal Glemp no debería ser el encargado de arreglar esta situación, sino el Gobierno de Polonia, que es responsable de Auschwitz y que debería usar su autoridad para imponer una solución.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_