Austria solicita oficialmente el ingreso en la CE

El ministro de Asuntos Exteriores de Austria, Alois Mock, presentó ayer en Bruselas la demanda oficial de adhesión a la Comunidad Europea (CE). Los 10 puntos en los que se sustenta la solicitud austriaca hacen mención expresa del estatuto de neutralidad, "una contribución específica que Austria aporta al mantenimiento de la paz y de la seguridad de Europa". La decisión del Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores de la Comunidad Europea es dar "una respuesta rápida" a esta petición de ingreso por parte de Austria

Tras la entrega de la solicitud formal de adhesión al presidente de turno de la CE y ministro de Asuntos Exteriores francés, Roland Dumas, Mock explicó que "la distensión Este-Oeste ha facilitado la presentación de la demanda". En su opinión, la decisión de su Gobierno de no entrar en ninguna alianza ni permitir la instalación de bases militares en el territorio de¡ país "no es incompatible con los tratados de la CE".

Aunque el estatuto especial que demandan los austriacos tiene el precedente de Irlanda, su opción de neutralidad completa plantea problemas sobre la futura negociación. La neutralidad, explicó Mock, es una situación intocable, puesto que fue decidida por el Parlamento federal en 1955, "después de que las cuatro potencias vencedoras [en la II Guerra Mundial] se hubieran retirado de Austria".

La adhesión de Austria a la CE, aunque las negociaciones para el ingreso no comenzarán hasta después de 1992, es algo que se da por hecho. Aparte del peso decisivo de la RFA, favorable a la extensión de su influencia cultural y política, está el hecho de que el país posee un alto nivel de renta por habitante, lo cual le convierte en un futuro contribuyente neto a las arcas de la CE. Como miembro de la EFTA, mantiene ya estrechas relaciones económicas con los doce, con quienes realiza el 70% de sus intercambios comerciales.

El único problema de esta candidatura es que reabre el proceso de ampliación en un período en el que la CE ha querido tomarse un tiempo de respiro para rematar las reformas en marcha. La petición austriaca desencadenará las demandas oficiales de Chipre y Malta, sin contar con otras posibles de miembros de la EFTA y con la vuelta a la carga de Turquía, país que presentó su solicitud hace dos años y que sólo ha recibido largas.

La apertura al Este figuré de nuevo en la agenda del Consejo de Ministros de ayer. El debate se centró esta vez en el encargodado por la cumbre de los siete de París a la Comisión Europea para que coordine la ayuda occidental a Polonia y Hungría. A propuesta de Jacques Delors, presidente de la Comisión, el Consejo planteó la necesidad de simultanear el suministro de víveres con "la organización de un sistema de distribución interna que garantice el abastecimiento de la población", manifestó una fuente comunitaria.