El presidente del grupo periodístico Time califica de cínica la OPA hostil de Paramount

Richard Munro, presidente de Time Inc., ha enviado una carta a Martin S. Davis, presidente de la Paramount, llamándole cínico. M unro no ha encajado bien la oferta pública hostil de adquisición (OPA) lanzada por la Paramount contra su compañía el pasado lunes, por un valor que supera el billón de pesetas en efectivo.

La OPA lanzada por la compañía Paramount ha puesto en peligro la fusión Time-Warner y, además de convulsionar el mundo de la comunicación norteamerícana, hace temer por la pérdida de la independencia informativa y la línea editorial de las revistas del grupo, que casi encaman la conciencia de este país.Munro, que ha enviado una copia de su carta a todos los jefes de división de Time, opina que la OPA de Paramount no sólo es "cínica, sino ciaramente engañosa". El presidente de Time no ha podido soportar que Martin Davis lanzara la oferta por su empresa pocas semanas después de haberle prometido que no lo haría. Pero el negocio es el negocio y la Paramout está más que dispuesta a ganar el pulso. Si lo consigue, la compra de Time será una de las mejores películas que jamás haya producido Hollywood.

"Estoy decepcionado y me doy cuenta de que no puedo confiar en un hombre como usted. Vive y aprende" es otro de los párrafos de la carta de Munro, quien además explica que "Time no ignorará el interés público ni la integridad de nuestras publicaciones, que son la esencia que lo que nosotros somos y de lo que nosotros hacernos". Time edita la revista del mismo nombre, además de conocidas publicaciones como Life, Fortune, People, Money y Sports Ilustrated.

La gran diferencia

El pasado jueves, la redacción de Time era un hervidero. Ni la revuelta de Pekín, que ha ocupado la portada de sus dos últimas ediciones, preocupaba tanto como la OPA lanzada por la Paramount. Henry Muller, el director ejecutivo de la revista, ha declarado que "no vemos nada en la oferta de la Paramount que asegure la independencia editorial que teníamos hasta ahora y que hubiérainos tenido tras el pacto Time-Warner".La oferta de Paramount no ha sentado bien en la redacción de Time donde creen que la editorial "comenzó a morir cuando cayó en el error de querer absorber la Warner Communications en un interac, de crecimiento artificial".El mercado bursátil de Wall Street continúa reflejando los efectos de la tormenta. Las acciones de Paramoant cerraron el jueves en 58,375 dólares con un volumen de tres millones de acciones, las de Warner en 56,50 con un volumen de 3,9 millones, y las de Time a 168 con un volumen, asimismo, de 2,7 millones.

Los analisias de Wall Street han comenzado a hacer números. Si Time y Warner combinaran sus compañías, los ingresos que hubieran acumulado en 1988 habrían alcanzado los 8.700 millones de dólares. Si se combinaran los ingresos de Time y Paramount la cifra, también en 1988, habría alcanzado los 9.300 millones de dólares. Los analistas opinan que la gran diferencia entre ambas opciones no es una cuestión financiera, sino una cuestión de términos.

Por esa razón Steven J. Ross, el presidente de la Warner, ha adquirido un papel clave en la negociación. Ross puede respetar su pacto con Time o favorecer la compra de Paramount. Mientras el director de Time se tira de los pelos, Martin Davis se frota las manos. Para él, la compra de Time significa la realización del sueño de su vida: dirigir el grupo de comunicación más grande que jamás ha existido. "Estamos preparados", ha dicho Davis, "para luchar por ambas compañías sin la intención de destruirlas".