Puesta al día
La declaración política y el documento Concepto global sobre control de armamentos y desarme, aprobados ayer por la cumbre de jefes de Estado y Gobierno en el 40º aniversario de la OTAN, suponen una puesta al día de la doctrina militar de la Alianza, después de dos décadas sin ser revisada, y un llamamiento para "superar la dolorosa división de Europa".Los dos textos -nueve páginas de declaración y 16 de concepto- guardan similitud en propuestas y contenidos, si bien su valor decisivo consiste en la iniciativa que toma una Alianza Atlántica hasta ahora pillada por sorpresa por las sucesivas propuestas de desarme provenientes de la URSS.
Dentro del bloque occidental, la República Federal de Alemania obtiene ventajas del pulso mantenido con Estados Unidos. No sólo porque la polémica modernización de los misiles de corto alcance queda postergada hasta 1992, sino también porque "la realización de un orden pacífico duradero tal como lo preconizan los aliados implica que se ponga fin a la división contra natura de Europa".
La declaración parece ir aun más lejos: "El muro que divide Berlín es un símbolo inaceptable de la división de Europa. Deseamos el establecimiento de una situación de paz en Europa en la que el pueblo alemán recobre su unidad por la libre autodeterminación".
Las ofertas de negociación para el desarme convencional y nuclear descansan en los cambios importantes que se producen en la Unión Soviética, en el "diálogo fructífero" entre los dos bloques y en la satisfacción por el proceso de reformas en el Este.
La "construcción del futuro" propuesta por la OTAN se apoya en que "la presencia en Europa de fuerzas convencionales y nucleares norteamericanas continúa siendo vital para la seguridad de Europa", pero también en la reducción de armamentos y en la extensión de la coperacion política y económica con los países del Este.
