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La URSS inaugura su nuevo Parlamento, que pondrá a prueba el pluralismo

Pilar Bonet

El Congreso de los Diputados de la URSS, el nuevo Parlamento, formado por 2.250 miembros, comienza hoy hoy en el Kremlin su sesión Inaugural, de duración indefinida, que deberá elegir al líder máximo del país y que demostrará el grado de pluralismo y e~ política existentes en la sociedad soviética, gobernada desde hace 72 años por los comunistas. El Congreso elegirá entre sus miembros el Soviet Supremo de la URSS, un Parlamento permanente formado por 542 diputados.

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Un 85% de los diputados del Congreso son miembros del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS), pero esto no se ha reflejado en una unidad de programa político, pues el PCUS está formado por 20 millones de personas con intereses diversos. Muchos de los que han arrollado en los comicios orientaron su campaña contra las capas dirigentes y el aparato administrativo del partido. Así lo hizo Boris Yeltsin, ex jefe de los comunistas de Moscú, cuya candidatura a la presidencia del Soviet Supremo de la URSS será presentada hoy, como rival a la de Gorbachov, por una treintena de diputados de Moscú, aliados con otros de los Urales y de Siberia, según informaron ayer fuentes del entorno de Yeltsin. Las fuentes no especificaron el total de diputados que apoyarán a Yeltsin, quien, según dijeron, propuso la celebración de un congreso anticipado del PCUS y el relevo del Politburó y el Comité Central en el pleno del Comité Central del pasado día 21. Yeltsin fue el único que se abstuvo cuando los miembros del Comité Central votaron, a mano alzada, a Gorbachov como candidato único a la presidencia del Soviet Supremo, afirmó un diputado comunista a esta corresponsal."Fracciones inevitable"

Según esta fuente, fue Gorbachov en persona quien comentó esta circunstancia en una reunión celebrada el martes con unos 1.900 diputados, pertenecientes mayoritariamente al partido. Los comunistas se constituyeron allí como grupo parlamentario, aunque no existe una comprensión clara de las obligaciones y la disciplina que ello comporta. Las "fracciones" en el partido comumista son "inevitables", ha dicho en la televisión soviética el historiador Roy Medvedev, diputado del Congreso, que acaba de ser readmitido en el partido, del que fue expulsado en 1968.

Gorbachov, que lleva varios días reuniéndose con los diputados del partido, reconoció que el Comité Central había formulado críticas a su trabajo y tuvo que oír otras de boca de diputados radicales como Arkadi Murashov, candidato a miembro del partido. Fue Ales Adamovich, el escritor bielorruso sin partido, quien defendió a Gorbachov. Otro tanto hizo el escritor Yuri Kariakin, que insistió en no permitir que el destino de Gorbachov siga el camino del de Jruschov, defenestrado en 1964. El ambiente del último pleno del Comité Central, como el del pasado marzo, indica que en el aparato comunista hay una actitud muy negativa hacia la reforma política emprendida por el líder el año pasado.

La candidatura única de Gorbachov parece estar fuera de discusión para la inmensa mayoría de los diputados del partido. No sucede así con el primer ministro, Nikolai Rizhkov, que por decisión del Comité Central del PCUS se presenta también sin alternativa al puesto que ahora desempeña, señalaron las fuentes. A Rizhkov se opone un buen número de diputados de Moscú y diputados de las repúblicas bálticas, que piden una política más decidida hacia la economía de mercado.

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Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

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