Greenpeace denuncia el apresamiento del 'Sirius' en las islas Columbretes
La organización ecologista Greenpeace denunció ayer el apresamiento del buque Sirius, que se encontraba realizando una visita al parque nacional marítimo-terrestre de las islas Columbretes, deshabitadas y situadas a 30 millas náuticas de la costa de Castellón. El Sirius y su tripulación fueron conducidos en la tarde de ayer al puerto de Castellón escoltados por la patrullera de la Armada Javier Quiroga.
Un portavoz de Greenpeace en Madrid manifestó ayer a este diario que la organización disponía de todos los permisos preceptivos para visitar las islas y comprobar el estado de conservación de este archipiélago de origen volcánico que fue declarado parque nacional marítimo-terrestre en diciembre de 1986. Los ecologistas habían solicitado permiso a los guardas de la Generalitat valenciana encargados de la protección de las islas.Alrededor de una docena de miembros de Greenpeace navegaban ayer en el Sirius, acompañados de un equipo de Televisión Española que está rodando un reportaje sobre las actividades de este grupo ecologista. Según la versión de Greenpeace, la patrullera Javier Quiroga comunicó con los responsables del Sirius para indicarles que estaban arrestados.
Fuentes de la Comandancia de Marina de Castellón manifestaron ayer que no tenían ninguna noticia dela presencia de buques de la Armada en aguas cercanas a las Columbestes. Asimismo agregaron que ignoraban si la organización Greenpeace había solicitado permiso para visitar el archipiélago. En similares términos se expresó un portavoz de la Comandancia de Marina de Valencia.
El presidente de Greenpeace en España, Xavier Pastor, que viajaba a bordo del Sirius, difundió ayer un comunicado de protesta por el apresamiento y se lamentó de la persecución que, en su opinión, sufren por parte de las autoridades de la Marina española.
Conservación
Pastor valoró ayer de forma positiva el estado de conservación de las islas Columbretes. Este pequeño archipiélago, que ocupa una superficie de poco más de 600 hectáreas, de las que tan sólo 15 están emergidas, sufrió una grave degradación ecológica durante los últimos veinte años hasta que fue declarado parque nacional marítimo-terrestre en diciembre de 1986.Durante el verano de aquel año el Sirius visitó por primera vez las islas Columbretes dentro de una campaña de defensa de los espacios naturales del Mediterráneo. La protección y conservación del archipiélago se vieron reforzadas el pasado mes de abril con la puesta en marcha de un servicio de vigilancia permanente por parte de la Generalitat valenciana.
El desarrollo del turismo y el consiguiente aumento de la visita de yates y embarcaciones de recreo, la práctica indiscriminada de la pesca profesional y la utilización de la veintena de islas e islotes como blanco de tiro de la aviación española pusieron en peligro la conservación de la riquísima fauna y flora del archipiélago. El mayor interés ecológico de las Columbretes radica en su condición de zona de paso y descanso de aves migratorias.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.