El fiscal mantiene la petición de dos años de cárcel para Lola FIores

Lola Flores pidió ayer en la última sesión del juicio celebrado contra ella por no haber hecho las declaraciones de la renta de 1982a 1985, que Hacienda le envíe un ramo de flores porque hoy es su santo. La bailaora realizó un largo alegato final, en el que, entre otras cosas, dijo: "Yo no he estropeado la imagen de Hacienda pero Hacienda ha estropeado la mía, y como mañana es mi santo lo mínimo que le pediría es que me mandara un ramo de flores". El fiscal, por su parte, mantiene su petición de dos años y un mes de cárcel para la cantante.

La artista abundó en las ideas que ha expresado estos días de juicio, como que se sentía como Morena Clara y que los ingresos de un mes debe conservarlos para los meses en los que no trabaja. También insistió en que si no fuera por las revistas del corazón, sólo con los ingresos de las actuaciones no podría vivir.El fiscal, Luis Jordana de Pozas, rebajó en sus conclusiones definitivas las multas e indemnizaciones al Estado que solicita para Lola Flores, aunque mantuvo su petición de dos años y un mes de cárcel para la cantante por no haber realizado la declaración del impuesto sobre la renta en los años 1982 a 1985. El defensor, José María Stampa, pidió la absolución por entender que existe un vacío legal y que no se puede condenar a la artista por unas leyes que no existen.

El abogado del Estado estimó que, además de los delitos fiscales, Lola Flores es también culpable de un delito contable.

El fiscal tranquilizó a la artista al señalar que no irá a la cárcel, ya que no se opondrá a la remisión condicional de la condena que se le imponga. El fiscal consideró a la Faraona culpable de dos delitos fiscales y otros dos contra la Hacienda pública, aunque redujo sus peticiones de multas en nueve millones de pesetas (de 96 a 87 millones), y las de indemnización, en más de siete (de 52 a 44,8 millones). Jordana retiró, además, la acusación de responsable civil directo que anteriormente formulaba contra el marido de la cantante, Antonio González, Pescaílla, por aplicación de la sentencia del Tribunal Constitucional que declaraba nula la acumulación de rentas de los cónyuges a efectos de tributación.

Stampa basó su defensa en el nuevo régimen tributario creado como consecuencia de la aplicación de la sentencia del Tribunal al Constitucional sobre la declaración conjunta de los matrimonios. El defensor de Lola Flores insistió en que existe un vacío legal y que al no poderse hacer una liquidación de los tributos no se puede cuantifica lo defraudado por la artista, y, consiguientemente, no se le puede condenar.