Subastarán una miniatura del 'David' hecha por Miguel Ángel

El deslumbrante mundo de las subastas no está exento de rincones oscuros, y no es raro que se produzcan situaciones sospechosas. En Londres se han subastado obras de arte robadas y han tenido que suspenderse, en el último momento, ofertas de objetos sobre los que existían sólidos fundamentos para no haber iniciado la puja. El último suceso tiene por protagonista a un presunto modelo en miniatura del David de Miguel Ángel, sobre el que se pensó que podría obtenerse la cifra de 50 millones de dólares (unos 10.600 millones de pesetas), récord absoluto.

La historia del descubrimiento del modelo está tiznada de sospechas desde el principio, cuando en 1986 el coleccionista y marchante parisiense Michel de Bry se encontró con la figura, un torso de escayola de unos 18 centímetros, en casa de la hija del compositor Arthur Honegger, en la que había estado desde que en 1921 le fue regalado al autor del oratorio Rey David. La historia profesional del marchante está llena de tales acontecimientos, y el diario The Independent dice que en su residencia hay un fauno que pasa por ser la primera escultura de Miguel Ángel, un sello de rubí del emperador Augusto y el espejo en que se miró por última vez Luis XVI antes de ser guillotinado. De Bry es también quien vendió por 280 millones de pesetas al Getty Museum de Los Ángeles la cabeza de un guerrero griego que luego ha resultado ser una copia contemporánea.

Sospechas

Sotheby's fue contactado para subastar la obra, cuya autenticidad ha certificado un experto en Miguel Ángel, el profesor norteamericano Frederick Hartt, con la publicación del libro David, por la mano de Miguel Ángel. La credibilidad de toda la operación empezó a resquebrajarse cuando trascendió que Hartt había llegado a un acuerdo con De Bry para cobrar una comisión del 5% sobre el precio de venta.En medio del episodio aparece también el marchante holandés Michel van Rijn, que estuvo en una cárcel española, según el mismo periódico. La estatuilla está ahora en la caja fuerte de un banco londinense.