García Vargas anuncia un impulso a la política antitabaco desde la presidencia española de la CE

El ministro de Sanidad, Julián García Vargas, anunció ayer que el Gobierno español dará un decidido impulso desde la presidencia de la Comunidad Europea (CE), que asumirá el 1 de enero de 1989, a "la defensa e implantación" de la política comunitaria antitabaco. García Vargas señaló que la directiva que prepara la CE sobre esta cuestión, a diferencia de la legislación española, "no pretende limitar el contenido de la nicotina", a pesar de que "origina la dependencia y que es nociva". Estas afirmaciones se produjeron ayer en Madrid en la apertura de la Primera Conferencia Europea sobre Política del Tabaco, a la que asistió la Reina y el director para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Erik Asvall.

A la conferencia, que se clausura el viernes, asisten 170 epecialistas de 30 países. Asvall destacó que cada año mueren entre medio millón y un millón de europeos por este "hábito artificialmente impuesto". Es como si cada día se estrellasen cuatro jumbos y pereciesen sus pasajes, explicó. "El problema es que nadie oye sus gritos de dolor, salvo sus familares" y destacó que estaplaga silenciosa ya apenas es noticia, por habitual. Afirmó que más de un tercio de los varones ya fuman y que las mujeres "están haciendo intensos esfuerzos para alcanzarlos", hasta el punto de que en algunos países ya fuman un 40% de ellas.Asvall también señaló que en los países del sur de Europa son las clases más acomodadas y mejor educadas las que fuman en mayor medida, frente a lo que ocurre en los países nórdicos. Este directivo reclamó con energía que médicos, docentes, políticos y cuantos profesionales tengan una proyección pública den ejemplo en esta batalla.

Escaso cumplimiento

García Vargas anunció una campaña de mensajes antitabaco para escolares y reconoció el escaso cumplimiento de la prohibición legal de fumar en lugares públicos, pero agregó que desea que esta medida vaya calando más por convicción que por intervenciones de corte autoritario. Y defendió el mutuo respeto entre no fumadores y fumadores para no hacer de los segundos "un nuevo grupo de discriminados sociales".Asvall censuró que no sólo no se condena el tabaquismo, sino que es la actividad que concita los mayores y más "ref¡nados y sibilinos" esfuerzos publicitarios, cuyo coste triplica el presupuesto de la OMS (unos 300.000 millones de pesetas).

Doña Sofía -que recibió una medalla por su apoyo a la conferencia-, no dudó en apelar a "los más nobles sentimientos" de los ciudadanos para erradicar esta plaga silenciosa "que perjudica no sólo al que fuma", sino al que lo respira, y de modo especial a niños, embarazadas y enfermos. La Reina hizo votos por la "desaparición de este mal, causa de enfermedades y muerte prematura", lo que propiciará una "vida más plena y feliz".

Manuel Marín, vicepresidente de la CE, mencionó las líneas comunitarias de acción: armonización del etiquetado; limitación del contenido máximo de alquitrán; protección de los jóvenes; prohibición de fumar en lugares públicos y armonización de la fiscalidad.

Marín, para resaltar los intereses económicos que hay que afrontar, recordó "que el tabaco constituye en la mayoría de los países europeos un monopolio estatal y la importancia de su cultivo en la cuenca del Mediterráneo".

Fuentes de Sanidad apuntaron que las mayores resistencias a la limitación de la nicotina las estaba ofreciendo Grecia, cuyos cigarrillos, aseguraron, tienen altos índices tanto de esta sustancia como de alquitrán. Asvall reclamó que se dedique un 1 % del dinero que genera el tabaco a combatir su consumo. Y aseguró que dos tercios de los fumadores quieren dejar este hábito.

Victoria Brynner, hija del popular actor Yul Brynner, recordó a los presentes el mensaje que su padre emitió poco antes de morir de cáncer de pulmón: "Hagas lo que hagas, no fumes". Desoír este consejo causa 2,5 millones de muertes cada año en el mundo. Una cada 13 segundos.