Atapuerca, uno de los yacimientos más importantes de Eurasia
Aparecen mas restos de 'Homo erectus' en las proximidades de Burgos
El conjunto de restos fósiles de Homo erectus tardío identificados hasta ahora en el yacimiento arqueológico de la sierra de Atapuerca, junto a Ibeas de Juarros, en la provincia de Burgos, incluye 89 fragmentos de cráneo, 6 restos de mandíbulas, 86 dientes, 37 falanges y 6 fragmentos de huesos largos de las extremidades. Este yacimiento puede considerarse, según Juan Luis Asuaga, paleontólogo de la universidad Complutense de Madrid y uno de los directores de las excavaciones, como "uno de los puntos cruciales en el mapa paleoantropológico mundial, particularmente en lo que se refiere a la evolución de la humanidad en Eurasia".
Se estima que el número de humanos representados hasta ahora en la zona de excavación, en la llamada Sima de los Huesos, es de 11 individuos como mínimo. Su antigüedad se remonta al Pleistoceno medio, un período histórico que abarca desde hace 700.000 años a unos 120.000 años. Asuaga asegura que en ningún otro yacimiento europeo del Pleistoceno medio se hallan representados tantos individuos juntos ni tantas regiones del esqueleto, aunque se han encontrado algunos restos fósiles aislados, como en el caso del yacimiento de Aragó, en Francia. "Solamente los yacimientos de Java o el de Chukutien, cercano a Pekín y muy parecido geológicamente al de Atapuerca, pueden considerarse superiores a éste en toda Eurasia. De cualquier forma, las prospecciones que hemos hecho hasta ahora representan un 5% de la potencialidad del yacimiento, porque sólo se han excavado capas de roca caliza bastante superficiales".Los primeros restos fósiles de este yacimiento se encontraron en 1976, y la autora del hallazgo fue Trinidad Torres, una paleontóloga que buscaba huesos de oso para preparar su tesis doctoral. Fue a partir de 1984, en cambio, cuando comenzaron a aparecer numerosos restos humanos. "Estos fósiles", comenta Asuaga, "presentan el mismo grado evolutivo que los encontrados en Asia o Africa, aunque tienen algunos rasgos característicos del hombre de Neanderthal. Por los huesos se puede observar que estos seres primitivos eran más robustos que el hombre actual, pero su esqueleto poscraneal (desde el cráneo hacia abajo) es muy similar. No tienen mentón en la mandíbula, y presentan una fuerte prominencia o tórux en el cráneo, a la altura de las cejas. El cráneo es también algo menor en cuanto a volumen que el del hombre actual".
Junto a los restos fósiles humanos hallados en la sierra de Atapuerca, que pertenecen en su mayoría a individuos jóvenes, se han encontrado abundantes fósiles de utensilios, hachas sobre todo, usados por estos pobladores primitivos. También han aparecido fósiles de la fauna de esa época: osos, ciervos, rinocerontes, leones, bisontes y caballos, que eran objeto de caza para estos robustos individuos antecesores del hombre de Neanderthal.
Cazadores y pescadores
Los miembros de este grupo de Homo erectus tardío eran probablemente, según Asuaga, cazadores y recolectores de época e incluso pescadores en los márgenes de los ríos. Según los estudios de paleopatología que se han realizado en los huesos encontrados, éstos muestran huellas de desnutrición y carencias alimentarías, detectadas sobre todo en los dientes, así corno algunos traumatismos. Sin embargo, no se han observado vestigios epidemiológicos. Estos individuos eran al parecer bastante móviles y el grupo debió de ser reducido. No se han encontrado vestigios de fuego, por lo que se cree que su uso fue posterior.Un grupo de investigadores de la Estación Vulcanológica de Canarias, han observado, además, tras estudiar algunos materiales de la zona de excavación, que en la época en que éstos vivieron debió de producirse un cambio de polaridad magnética en la Tierra.
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