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Un millón y medio de personas sin hogar por las mas graves inundaciones del siglo en Sudán

Un millón y medio de personas han quedado sin hogar y al menos 11 personas han resultado ahogadas en los últimos días en las inundaciones más graves del siglo en Sudán, como consecuencia de las fuertes lluvias torrenciales que han afectado a este país africano, de 22 millones de habitantes y una extensión de 2,5 millones de kilómetros cuadrados. Los daños más graves ocurrieron en la capital, Jartum, y en las regiones limítrofes de Kassala y Gedaref, afectadas, además de por las lluvias, por el desbordamiento de los ríos Nilo Azul, Atbara y Gash.

Funcionarios sudaneses y diplomáticos occidentales informaron ayer que las inundaciones se han extendido a grandes zonas del norte del país, mientras se teme que la crecida del Nilo Azul, que no ha dejado de aumentar su caudal en los dos últimos días, agrave aún más la situación en la capital.Aunque en un principio se informó que podían haber muerto decenas de personas, ayer en Ginebra fuentes de la organización UNDRO (Oficina del Coordinador de las Naciones Unidas para el Socorro en Caso de Desastres) situaba en 11 el número de víctimas mortales causadas por la catástrofe.

Según datos del mismo organismo de la ONU, durante la tarde del pasado jueves 4 cayó en Jartum una cantidad de agua seis veces superior a la de todo el año 1987.

La capital sudanesa, donde viven cuatro millones de habitantes, lleva seis días sin fluido eléctrico, sin agua corriente y escasez de alimentos y medicinas. Asimismo, la mayoría de sus 75.000 líneas telefónicas sin funcionar.

La grave escasez de alimentos y de medicinas amenaza con agravar dramáticamente la situación catastrófica que sufre el país, si no llega con carácter urgente la ayuda internacional, solicitada por el Gobierno sudanés a través del ministro de Exteriores, Husein Abu Seleh. Hace apenas dos semanas, Sudán informaba que estaba sufriendo la peor sequía de los últimos cuatro años.

Estado de emergencia

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La Comunidad Europea anunció ayer el envío de una primera ayuda de emergencia de 650.000 ecus (unos 90 millones de pesetas) y varias organizaciones internacionales y Gobiernos han empezado también a mandar material de socorro al país africano. España ha enviado un cargamento con mantas, alimentos y medicinas. La colonia española en Sudán, compuesta por un escaso número de misioneros residentes en Jartum y en sur del país, se encuentran sin novedad, según informaron fuentes de Exteriores.La Cruz Roja, Cáritas y Médicos sin Fronteras son algunas de las organizaciones humanitarias que están prestando ayuda desde un principio a Sudán tras el comienzo de las catastróficas inundaciones. Según diplomáticos occidentales que sobrevolaron Jartum en helicóptero, la situación más dramática la sufren los cinco campos de refugiados situados en torno a la capital. Cientos de miles de casas de Jartum fueron arrastradas por las aguas hacia el Nilo, unas flotando con sus habitantes dentro y otras destrozadas, arrastrando los enseres de los habitantes por el río.

El lunes el Gobierno declaró el estado de emergencia en todo el país por un espacio de seis meses, en un mensaje emitido por radio y televisión por el jefe del Estado, Idris Al Banna. Aparte de las inundaciones, las más graves sufridas por Sudán en este siglo, Banna justificó la declaración del estado de emergencia también por los cinco años de guerra civil en el sur del país, los problemas económicos, el aumento de los asaltos armados y lo que llamó infiltración extranjera en la región occidental de Darfur.

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