Economía espera una reactivación de la inversion privada en 1989

CARLOS SCHVARTZLa tasa de formación bruta de capital fijo llegará al 27% en 1992 y la participación de la inversión pública en ella supondrá el 5,5% ese mismo año mientras que ahora representa el 4%. Antonio Zabalza, secretario general de Planificación y Presupuesto, apostó ayer en el seminario sobre gasto público organizado por el Fondo para la Investigación Económica y Social en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo por una explosión de la inversión privada en 1989 y años sucesivos.

" España se encuentra todavía en una fase de desarrollo en la que la existencia de un esfuerzo inversor considemble y sostenido va a ser necesario durante un período de tiempo relativamente largo. Un fracaso en este campo podría poner seriamente en peligro nuestra capacidad de competir frente a otros países de la CE, y por tanto dificultar nuestro crecimiento futuro", afirmó Zabalza.

El funcionario estimó que la formación bruta de capital fijo (FBCF) puede alcanzar este año como porcentaje del Producto Interior Bruto el 23% -contabilizando el esfuerzo público y privado- y que espera para 1992 una tasa del orden del 27%.

Las administraciones públicas participaron en la FBCF con un 4% en la actualidad, pero esta tasa podría llegar al 5,5% en 1992.

El eje del gasto será inversor, advirtió, "porque la Administración actual es perfectamente consciente de que, aún sin olvidar necesidades en otros campos del gasto público, es necesario dar una prioridad sustancial a la inversión en infraestructuras".

Zabalza caracterizó la situación actual afirmando que "existen en España en estos momentos las condiciones idóneas para que se produzca un fuerte relanzamiento de la inversión privada que, junto con el dinamismo complementario de la pública, puede situar la participación de la inversión en el PIB en cotas ni siquiera imaginadas hace un par de años". Señaló además cambios significativos en la estructura de gestión del gasto, que se centran en coordinar la participación creciente en el gasto de los ayuntamientos, autonomías y administraciones territoriales en general, que acaparan actualmente el 65% del gasto, contra el 30% que administraban en 1980. Este vuelco, que dejó a la Administración Central la administración de sólo un 35% del gasto total, obligó a los órganos de control a diseñar otra forma de gestión.

El otro problema al que deben atender los gestores del gasto público es la corta temporalidad de los planes, que venían limitándose al año.

Gasto regional

Zabalza ratificó el salto a los escenarios cuatrieniales anunciado por José Borrell la semana pasada aquí. Dijo al respecto que "el escenario macroeconómico y presupuestario 1989-1992 es producto del proceso de discusión y análisis que ha existido en el seno de las comisiones funcionales de gasto desde el pasado mes de febrero. Naturalmente, éste es un documento propuesta, cuya concreción final y cuya plasmación presupuestaria para 1989 no se conocerá hasta el momento de presentar al Parlamento en septiembre el anteproyecto de la Ley de Presupuestos".

El funcionario subrayó la importancia de la Admimstración Central con el desplazamiento del gasto hacia las regiones y que "deberá asumir de forma creciente un papel marcadamente estratégico en el desarrollo potencial productivo del país".

Los objetivos decisivos de esta estrategia están vinculados a la infraestructura. "Aspectos como la red básica de carreteras, el transporte férroviario o las telecomunicaciones, todas ellas materias de competencia de la Administración Central, harán que esta función estratégica y coordinadora acabe siendo la labor esencial de la Administración Central en materia de inversión", concluyó Zabalza.