Shultz "vuelve la espalda a la verdad", según la Prensa oficial siria

La Prensa siria, de carácter oficial, recibió ayer con críticas la visita del secretario de Estado norteamericano, George Shultz, cuyos esfuerzos de pacificación tacha de poco sinceros, por considerar que "vuelve la espalda a la verdad". Shultz, que se entrevistó durante dos horas y media con el presidente Hafez el Asad, inició el pasado viernes en El Cairo su cuarta gira por Oriente Próximo en este año.

El secretario de Estado viaja con la intención de reactivar la iniciativa de paz norteamericana que ya había presentado a los mandatarios de la zona en el curso de tres viajes precedentes este mismo año.Desde que a principios de mayo se conoció la intención del jefe de la diplomacia estadounidense de regresar a la región, los medios de comunicación sirios -todos ellos bajo control estatal- se han mostrado pesimistas respecto a los resultados de dicha gira. Los comentaristas sirios han subrayado desde entonces las contradicciones de la actitud de Washington en el conflicto árabe-israelí.

Tampoco la Prensa egipcia, que inicialmente destacó favorablemente el nuevo enfoque del problema adoptado por Shultz en esta gira, se muestra muy optimista. Los columnistas destacan el rechazo del Gobierno israelí a todos los intentos de pacificación. Shultz, que el sábado viajó a Amman y el domingo a Jerusalén, ha encontrado en las autoridades israelíes la misma negativa radical que, por razones opuestas, manifiestan los dirigentes palestinos a su plan.

Obstáculos al plan

Cualquier esperanza es aventurada, ya que la Administración de Reagan no acepta en ningún caso la representación directa en una futura conferencia internacional de paz de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), considerada por los árabes como el "único representante legítimo" del pueblo palestino. Washington tampoco acepta la creación de un Estado palestino independiente y, según la versión más optimista, propondría la adminístración por Amman de los territorios ocupados de Gaza y Cisjordania, cuyo destino final en ese caso permanece incierto.Asad ha reiterado con toda seguridad a Shultz su oposición a esta propuesta, así corno a cualquier otra que no conceda a Siria un papel decisivo en las negociaciones. Por otro lado, la renuncia del primer ministro israelí, lsaac Shamir, a toda fórmula de conferencia internacional hace inviable una solución inmediata y empieza a poner en aprietos a Estados Unidos frente a sus aliados árabes moderados.

Por otra parte, Richard Shifter, secretario de Estado adjunto encargado de derechos humanos, visitó ayer la banda de Gaza, acompañado por el coordinador de actividades israelíes en los territorios ocupados, con quien estudió un mecanismo que permita a la Administración norteamericana estar informada rápidamente de la situación de los derechos humanos en la zona bajo ocupación.