Felipe González pide en Estados Unidos ayuda occidental para la Unión Soviética

El presidente del Gobierno español, Felipe González, sugirió ayer en Estados Unidos que el mundo occidental ayude a la URSS a superar sus dificultades económicas y "reaccione inteligentemente ante la nueva propuesta soviética", especialmente en lo referente a la limitación de armas nucleares. También criticó implícitamente la "ceguera" política de la Administración de Ronald Reagan respecto de Latinoamérica, a la que no se admite junto con Europa y Estados Unidos dentro de lo que debería ser una "relación triangular" en el mundo occidental.

González recordó, durante la conferencia que pronunció ayer en la universidad de Harvard, la actitud de EE UU tanto en su ¡apoyo al régimen. de Franco coino en la exclusión de España del plan Marshall y pidió comprensión para la "peculiaridades" españolas en materia de política de seguridad atlántica.González abogó, ante un auditorio de unas 500 personas, porque los políticos no caigan en "una pura estrategia militar al tratar temas de defensa". En el curso de una conferencia de una, hora de duración, González defendió "una Europa más segara de sí misma" en todos los terrenos, incluido el de la seguridad, y admitió que ello provocará "dificultades de ajuste" en las relaciones con EE UU.

El presidente, que improvisó una parte de su intervención, largamente aplaudida pese a su carácter informal, criticó, durante el coloquio posterior, la actitud de la Administración de Reagan -aunque sin citarla expresamente- por su visión "a corto plazo" de los problemas de América Latina y por su política en Panamá. También elogió el jefe del Ejecutivo la trayectoria española tanto en el campo de la política internacional como en el de la economía, reconociendo, empero, que los sindicatos tienen razón cuando afirman que el beneficio empresarial crece más rápidamente que la renta salarial. A este respecto, admitió "cierta ineficiencia" en la redistribución de impuestos y salarios.

Antes de la conferencia, Javier Solana, portavoz gubernamental y ministro de Cultura, rechazó tajantemente que este viaje que Felipe González realiza a EE UU sea "políticamente irrelevante", como señalan algunas críticas en España. "De no venir a este tipo de cosas se cometería un error", dijo Solana. Para el ministro, "no son tan graves los problemas" en España, -incluyendo el conflicto de la educación- "como para que puedan interferir en la actividad internacional del presidente del Gobierno".

Sin embargo, Felipe González, cuyos propósitos iniciales consistían, según fuentes de la Moncloa, en permanecer este fin de semana en Estados Unidos, volverá hoy a Madrid.

Algunos medios del séquito presidencial admitieron la posibilidad de que González no desea dar la imagen de que prolonga su permanencia en el extranjero cuando en el interior acucian algunos problemas. Ello no quiere decir, añadieron estas fuentes, que el presidente del Gobierno vaya a estar junto a Nicolás Redondo en las celebraciones ugetistas del 1 de mayo, dado que será Ramón Rubial quien encabece la delegación del PSOE en estos actos, y se considera improbable una comparecencia de González a los mismos, especialmente tras las últimas críticas de UGT al Ejecutivo.