El problema escolar

Puede que la opinión pública esté en contra de la huelga de profesores, quizá más que nada por la falta de prestigio y consideración que a través de los años este colectivo ha sufrido.La enseñanza no ha importado seriamente al poder establecido en la dictadura, pero lo que es más triste y desalentador es que ocurre igual con lo que ahora llamamos democracia. Digo con lo que ahora llamamos democracia porque la democracia debe ser justicia, y la justicia la entienden estos jóvenes del PSOE como prepotencia y arbitrariedad del más burdo estilo. Modifican o confeccionan leyes sobre la marcha para conseguir los objetivos que les interesan en cada momento y que, por supuesto, no son para mejorar la calidad de la enseñanza, ni muchísimo menos. Esto, por lo que están haciendo, debe de importarles muy poco.

Voy a contar un ejemplo de los disparates que suelen hacer con frecuencia estos muchachos. Pertenezco al instituto de bachillerato Tetuán-Valdeacederas, situado en dicho barrio. Un instituto pequeño, con tres turnos para satisfacer las demandas de escolarización de la zona y con la plantilla de profesores fijos hinchada, es decir, de acuerdo a estos tres turnos. Desde hace 10 años hay un proyecto aprobado, con planos en la sección de urbanismo del Ayuntamiento de Tetuán, por el que estaban en parte comprados, en parte expropiados, todos los terrenos colindantes hasta el final de la calle del instituto, para ampliación de éste. Posteriormente surge la construcción de la plaza de la Remonta, situada a 400 metros de nuestro instituto, y el proyecto de un nuevo centro en ella. Recientemente, la expropiación de los terrenos antes mencionados se levanta, y se venden los que había en propiedad, puesto que el nuevo instituto va a cubrir las necesidades de la zona. A los profesores del instituto Tetuán-Valdeacederas se les dice que, como en todos los casos de construcción de nuevos centros en las proximidades, se les dará la posibilidad de pasarse por desdoble a la Remonta.

Pero estos chicos del PSOE no descansan. A nosotros nos han asignado uno de ellos (cualquier entrevista con instancias superiores nos ha sido negada): Gregorio Anta, profesor de formación profesional, que ahora es uno de los subdirectores provinciales del Ministerio de Educación y Ciencia. Sentado en su despacho decidió que un instituto de bachillerato, el de la Almudena, situado en la zona de Alonso Martínez, debía desaparecer para ampliación de un centro de formación profesional colindante con él. Una ampliación que, según la directora de este centro, no es necesaria. Bastaría con remodelar el ya existente. Los profesores de la Almudena pasarían a la Remonta (en una operación de dudosa legalidad, puesto que las zonas están muy alejadas) y los alumnos de la Almudena (más de 800), con un destino incierto, serían dispersados.

Aunque parezca un disparate, si nadie con poder interviene para enmendarlo, se va a consumar. El instituto Tetuán-Valdeacederas no contará para el próximo curso con el turno de tarde, y puede que en el futuro con ninguno, pues los alumnos pasarán a la Remonta, un instituto perfectamente dotado y con el doble de aulas. Los profesores del Tetuán-Valdeacederas se verán, progresivamente y de forma obligatoria, desplazados de la zona que habían elegido por concurso mediante la figura, también creada por estos muchachos del PSOE, del profesor desplazado.

Pero como dice Gregorio Anta: "¡Qué drama! Lo más lejos que se os puede mandar es a Vicálvaro".- y 40 firmas más.