Las relaciones de la CE y Marruecos, a punto de normalizarse con la firma del acuerdo pesquero

El conjunto de las relaciones entre la Comunidad Europea (CE) y Marruecos, incluida la Pesquera, está, en principio, al alcance de la mano con la inminente rúbrica por ambas partes de un acuerdo pesquero, que beneficia sobre todo a España, y de tres protocolos de cooperación técnica, comercial y financiera.

La relación bilateral España-Marruecos experimentará también una mejora con la rápida conclusión de un acuerdo marco de cooperación y la concesión de facilidades de tránsito para los productos agrícolas marroquíes, especialmente los agrios, por el territorio español, que quedó apalabrada en la cena que celebraron el martes por la noche los secretarios de Estado español y marroquí.El jefe de la diplomacia marroquí, Abdelatif Filali, anunció a principios de semana la "inminencia de un acuerdo muy provechoso para su país", y ayer, fuentes comunitarias de muy alto nivel confirmaron que estaba prevista hoy, o como muy tarde mañana, la rúbrica de los cuatro acuerdos mencionados, cuya firma revestirá, más tarde, un carácter solemne.

A media tarde de ayer, las delegaciones comunitaria y marroquí reanudaron la negociación pesquera, interrumpida desde finales de diciembre, cuando fueron expulsados más de 700 barcos españoles de las aguas del reino; pero ambas partes señalaban que sólo les quedaban algunos flecos por atar y que podían terminar su labor en cuestión de horas.

En cuanto esté apalabrado el acuerdo, los embajadores de los doce ante la CE se reunirán para darle su aval, pero no se descarta, que surjan entonces algunos problemas menores, porque un Estado miembro, Portugal, parece considerar excesivas las facilidades de acceso al mercado comunitario concedidas a las conservas de sardina marroquí, y otros, como la República Federal de Alemania y el Reino Unido, pueden estimar demasiado caro el precio a pagar por el acuerdo.

Reducción de capturas

Aunque se seguían ignorando los detalles del compromiso apalabrado, es, sin embargo, sabido que estipula una reducción lineal de las capturas, sobre todo de cafalópodos, y la consiguiente rebaja de las toneladas de registro bruto (TRB) de los barcos autorizados a faenar en esas aguas, pero sin Ilegar hasta las 68.000 -28.000 menos de las pedidas por Bruselas- propuestas por Rabat. Además de los pesqueros españoles y portugueses, los franceses, italianos, griegos, daneses y holandeses podrán también acceder a esas aguas.

A pesar de que Filali insistió en el carácter global de la negociación con la CE, los protocolos técnico y comercial, que pretenden compensar al reino alauí por la ampliación de la Comunidad a España y Portugal, no serán modificados, pero sí el financiero. La cantidad de préstamos y donaciones otorgados a Rabat en los próximos cinco años seguirá ascendiendo a 45.360 millones de pesetas -63% más que en el anterior lustro-, pero las condiciones de su concesión serán ligeramente mejoradas. Madrid ha accedido también a que el protocolo comercial se aplique a Ceuta y Melilla, que no forman parte de la unión aduanera comunitaria.

La declaración de Filali dando a entender que el acuerdo pesquero reconocerá la soberanía del reino sobre las aguas del Sáhara occidental ha sido, por último, mal recibida por la Comisión Europea, que barajaba ayer la posibilidad de efectuar hoy una declaración recalcando que sólo concierne a las zonas marítimas que el derecho internacional considera bajo jurisdicción marroquí.

[Mientras tanto, los marineros españoles afectados por el amarre de la flota pesquera que tradicionalmente faena en Marruecos han decicido esperar el resultado final de las negociaciones antes de tomar nuevas medidas de presión.

En Algeciras, los pescadores celebraron una asamblea y decidieron no desplazarse a Cádiz para entrevistarse con un representante de la Administración central para explicarle su situación y debatir los asuntos pendientes.]