Los funcionarios dijeron al médico que Rueda se hirió en una pelea entre presos

José María Barigón Pérez, uno de los dos médicos procesados, junto con otras diez personas, por la muerte en la cárcel de Carabanchel del recluso anarquista Agustín Rueda y las lesiones a otros siete presos, declaró ayer ante el tribunal que enjuicia estos hechos, ocurridos en 1978, que en su primera inspección a Rueda, los funcionarios le informaron que su estado y el de los restantes internos se debió a una pelea entre ellos. A preguntas del fiscal, Barigón explicó que sólo cuando descubrió en el cuerpo de Rueda las múltiples contusiones y hematomas, el jefe de servicio informó al médico que Rueda había tenido que ser reducido por los funcionarios.La declaración de los dos médicos era esperada con expectación, dado que entre las causas de la muerte de Rueda figura, según los informes forenses, el no haberle prestado atención médica suficiente. Barigón manifestó que, ante el estado de Rueda, realizó varias pruebas por si existía alguna fractura. Declaró que el jefe de servicios atribuyó las heridas inicialmente observadas en el recluso a una pelea entre internos y posteriormente informó que Rueda había sufrido una caída.

Cuando el médico pidió a Rueda que se quitara la camisa y comprobé los múltiples hematomas por casi todo el cuerpo, fue informado de que había tenido que ser reducido.

Previamente declaró ante el tribunal el último de los funcionarios procesados, Andrés Benítez Ortiz, quien reiteró la respuesta "no recuerdo" a las preguntas formuladas por el fiscal y los abogados defensores. Benítez se negó a contestar a los acusadores particulares.