Aria de la soledad
Monólogo con dos personajes. Uno, arrasado por la soledad; el otro es la soledad misma, desnuda o apenas velada, mimosa, enfadada, displicente, silenciosa o huidiza, femenina: como cualquier proyección de uno mismo, insatisfactoria. El texto despliega un doble juego. El personaje, actor y escritor, sufre en su soliloquio por la dificultad de encontrar las palabras para la creación de un monólogo; al final son estas mismas palabras, grabadas en un magnetófono, las que crearán el texto buscado, que reflexiona sobre sí mismo; y se escucha a la autora, por debajo del personaje. Lenguaje preciso que busca una sonoridad.Se escuchan heptasílabos y endecasílabos, muy marcados por el actor Juan Carlos Montalbán. Habla éste con moderación y claridad, con desesperación contenida.. El papel casi silencioso de Miarta Dualde no es tan fácil: una sombra y, al mismo tiempo, una presencia carnal y tentadora; ser y no ser. Lo consigue.
A palo seco
De Carmen Martín Gaite. Intérpretes: Juan Carlos Montalbán y Marta Dualde. Vestuario y coordinación plástica: Helena Sanchís. Dirección: Emilio Hernández. Sala III del Centro Cultural de la Villa de Madrid, 12 de diciembre.
Emilio Hernández dirige con elegancia y sugerencia, ayudado por Helena Sanchís, que firma el vestuiario y la coordinación plástica. Es un escenario central, entre dos gradas de espectadores -una sala improvisada en el Centro Cultural de la Villa de Madrid-; la proximidad que se busca en estos escenarios está matizada por una transparencia y por luz tenue para conseguir la apariencia fantasmal, de los personajes y el mobiliario; gusta esa calidad pictórica, pero termina por cansar un poco.
Gustó mucho al público del estreno, y la autora salió a saludar con el director y sus ayudantes.